Cinco señales de que vas a tener un bebé grande
La macrosomía fetal afecta al 9 % de los recién nacidos del mundo
¿Cuánto suele pesar un recién nacido? ¿Cuánto es demasiado o demasiado poco? Según la universidad de Standford, lo usual es que un bebé pese de media 3,4 kg y mida entre 46 y 53,5 centímetros. Poder conocer aproximadamente las proporciones que tendrá el que está por llegar, permite anticiparse a la hora de comprar pañales o ropa, y que luego no haya que cambiarlo todo.
Un 9 % de los bebés del mundo nacen con macrosomía fetal. Bajo ese nombre tan serio no se halla más que un niño más grande de lo normal. En este grupo están todos los que pesan al nacer más de cuatro kilogramos, sin importar su semana de gestación.
Aunque a largo plazo, la macrosomía no entraña riesgos para la salud, en el momento del parto puede significar para la madre una complicación del parto vaginal, y para el bebé, padecer lesiones durante el alumbramiento. Las madres embarazadas de niños con macrosomía suelen dar a luz mediante cesárea, la manera que tienen los médicos de asegurarse de que el parto sea lo más seguro para ambos.
No existe ninguna prueba médica para conocer con exactitud si el recién nacido tiene un peso mayor de lo esperado, pero sí hay ciertas señales que lo indican:
- Gran altura del fondo uterino, que tiene como resultado una barriga más prominente en la embarazada.
- Líquido amniótico en exceso, reflejo de la producción de orina del bebé.
- Ser diagnosticada con diabetes gestacional está relacionado con un mayor peso del niño al nacer.
- Una ecografía puede mostrar el tamaño que va a tener.
- Si antes se ha tenido otro hijo macrosómico, es probable que se vuelva a repetir.
Al igual que no se sabe con exactitud cuán ocurre, tampoco qué lo provoca. Se ha relacionado con la macrosomía fetal la obesidad de la madre, así como la diabetes gestacional. También se han establecido como posibles causas tener un parto múltiple o ganar bastante peso durante el embarazo, pero otros factores que pueden desencadenarlo es que la gestación se alargue por dos o más semanas y que el bebé sea un varón, que suelen tener más peso al nacer que las niñas.