Estos son los dos ingredientes que debe tener la merienda perfecta de tus hijos
Tan solo un 7,3 % de los niños de entre tres y seis años toman fruta y yogur para merendar, mientras que las combinaciones más habituales en este rango de edad son leche y galletas (12,5 %), sándwich y zumo (8,9 %) y leche con bollería (8,8 %)
Un pequeño cartón de zumo y un 'bocata' es la merienda más tomada por los niños españoles. Concretamente, más de la mitad de los tentempiés que los padres preparan a sus hijos, un 49,9 %, está formado por pan y embutido. Mientras, la bollería y las galletas lo toman el 37,1 % de los infantes de entre siete y 17 años. Estos datos se extraen del Libro Blanco sobre las Meriendas infantiles que ha elaborado un equipo de nutricionistas y ha sido impulsado por la Asociación Española de Fabricantes de Yogur (AEFY).
La cuarta comida del día, la que se ingiere por la tarde, se caracteriza en España por su «gran aporte calórico y baja calidad nutricional», se afirma en el libro blanco. Esto tiene una repercusión directa en la salud durante la infancia e impactar en la edad adulta y, según añaden, «ser motivo de sobrepeso, obesidad, diabetes o patologías cardiovasculares e, incluso, cáncer».
Revisión científica de la merienda
Cinco expertos han colaborado en la elaboración del informe, para el que han consultado 176 artículos científicos tanto nacionales como internacionales. Tras ello, llaman la atención sobre lo que los padres dan a sus hijos a la salida del colegio. La merienda, indican, representa un 10 % del total del valor enérgico (calorías) que se consumen al día. «Es una gran oportunidad para mejorar la calidad de la dieta, incorporando alimentos con un perfil nutricional adecuado», proponen.
Según los datos recogidos tan solo un 7,3 % de los niños de entre tres y seis años toman fruta y yogur para merendar. En cambio, las combinaciones más habituales en este rango de edad son leche y galletas (12,5 %), sándwich y zumo (8,9 %) y leche con bollería (8,8 %).
El libro blanco de las meriendas recoge distintas evidencias científicas con las que prueban que una de las mejores opciones para la merienda es optar por alimentos propios de la dieta mediterránea. Por tanto, los nutricionistas señalan que una buena mezcla para la merienda sería un lácteo, como un yogur, junto con fruta o frutos secos. «Así ayuda a cubrir los requerimientos calóricos y nutricionales necesarios para el normal crecimiento y desarrollo de los niños», indican.