Las familias numerosas se oponen a la ley que las elimina: «Solo quieren que seamos más pobres y dependientes»

el Gobierno ha terminado aprobando la ley de familias. El proyecto ideado por Ione Belarra durante la pasada legislatura y abandonado por el adelanto electoral, ha sido retomado por el ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, sin apenas retoques. Su objetivo, según él mismo ha indicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que la norma «supondrá un hito en la política social de nuestro país».

Casi un año y medio después de idas y venidas –el 13 de diciembre de 2022 fue la primera vuelta de la norma en el Consejo–, Bustinduy la ha defendido afirmando que la eliminación del título de familia numerosa supone «adecuar nuestro ordenamiento a la realidad de nuestro país». Quienes no están tan de acuerdo con esta afirmación son las propias familias numerosas.

«Aunque no nos ha gustado a ninguna familia numerosa, algunos han querido mirar de forma práctica algo bueno que pueda haber en esta ley, alguna ayuda que pudiera surgir», afirma María Menéndez de Zubillaga –presidenta de la Asociación de Familias Numerosas de Madrid y fundadora de la plataforma Siempre seremos Familia–, quien no está tan convencida con este buscar el lado bueno de las cosas. «Quieren hacer una política asistencial para que seamos más pobres y estemos más necesitados de las ayudas estatales, regionales o locales; que estemos dependiendo de ellos», añade

Más de 80.000 firmas contra la ley

La oposición de las familias numerosas al proyecto lleva tiempo movilizada. La Federación Española de Familias Numerosas registró en la plataforma Change.org una recogida de firmas para que no fuese eliminado el concepto de familia numerosa y desde el 19 de diciembre de 2022 se han apuntado 81.357 personas. El presidente de la federación, José Manuel Trigo, reconoció tras personarse a entregar parte de las firmas en el Congreso de los Diputados en mayo de 2023 que la ley, aborta aspectos necesarios, como la conciliación, aunque considera que el cambio de nombre «es un tema ideológico» y que el tipo de familia numerosa se diluye al incluirlo en el de familias con mayores necesidades de apoyo.

Al conocer la aprobación de la norma, la federación ha lamentado que el Gobierno no haya aprovechado para modificar el proyecto de Belarra y conservar el nombre y título de familia numerosa en esta ley, si bien, acogen con satisfacción algunas medidas que se recogen en el texto legal como el reconocimiento de las familias con 4 hijos como familias numerosas de categoría especial, también las de 3 hijos de parto o acogimiento múltiple o las que, también con 3 hijos, tengan ingresos ajustados (renta per cápita que no supere el 150 % del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples).

Una clara apuesta por la familia

Por su parte, desde The Family Watch opinan que es necesaria una apuesta más clara por las familias. «España sigue siendo el país de la Unión Europea que menos incurre en políticas sociales de ayuda a las familias», indica su directora general María José Olesti. En medio del invierno demográfico que vive nuestro país «es urgente una apuesta clara de medidas que apoyen la maternidad y que que tenga en cuenta especialmente por ser una ley de familias la perspectiva de familia con carácter vinculante».

Acabar con la discriminación

Las familias numerosas reclaman que se mantenga su nombre y piden un reconocimiento más justo a las familias con más hijos en las prestaciones económicas y sociales para que sean proporcionales al número de hijos. «Llevamos años denunciando la discriminación de las familias con 4 o más hijos en muchas prestaciones, empezando por la de desempleo, que solo tiene en cuenta 2 hijos; o el IMV, solo 3… y, ahora, la nueva Ley de Familias mantiene el mismo planteamiento de considerar igual, en cuanto a necesidades, un hogar de 3 hijos que uno de 5. Esperamos que esto se corrija también en la Ley», destaca Trigo.

El momento de pedir estos cambios llegará cuando, según ha dicho el ministro de Derechos Sociales que va a hacer, se convoque a los colectivos y grupos a los que afecta directamente la norma para una ronda de consultas. No obstante, la de Siempre seremos Familia no optimista respecto a ello. «Ya nos han demostrado que la interlocución no existe, solo quieren hablar con quienes les apoyan», concluye Menéndez de Zubillaga.