Charlene de Mónaco no está en el Principado y «su dolencia no es solo física»

Aunque parecía que el mal momento que estaba viviendo Charlene de Mónaco se había terminado con su regreso al Principado después de medio año de estancia obligada en Sudáfrica por una infección otorrinolaringológica, la princesa sigue sin recuperarse. Esta misma mañana, el príncipe Alberto concedía una entrevista que arrojaba todavía más dudas sobre el verdadero estado de salud de su mujer, ausente en los últimos eventos oficiales.

Reconocía que no solo no estaba ya en el Principado, como así se creía, sino que además seguía débil. «Está mejor, pero todavía necesita descanso y paz», ha dicho el príncipe Alberto durante la entrevista con Monaco Matin.  Es lógico que después de tantos meses fuera necesite un tiempo de adaptación para coger fuerzas, pero lo que ha llamado la atención es que afirme que «hay fatiga, no solo física, que solo se puede tratar con un periodo de descanso y seguimiento».

También ha asegurado que irán a verla próximamente aunque, por seguridad, no ha querido dar detalles de su ubicación: «No está en el Principado, pero podremos visitarla muy pronto. No puedo decir más por discreción. Proteger la comodidad y la privacidad es esencial para su recuperación, la ubicación de la princesa seguirá siendo estrictamente confidencial».

Unas palabras que avivan los rumores sobre la salud de la princesa y la robustez de su matrimonio con Alberto de Mónaco tan en boca de todos durante su estancia obligada en Sudáfrica. De hecho ya se hablaba de que la exnadadora olímpica no vivía con su marido, sino que residía en un apartamento situado a unos 300 metros de la residencia Grimaldi.

Fue el pasado 8 de noviembre cuando Charlene regresaba a casa después de tener que ser operada hasta en tres ocasiones para reencontrarse con sus hijos y Alberto de Mónaco. Estaba previsto que volviese mucho antes pero los médicos le impidieron volar.