El Príncipe Harry y Meghan Markle quieren vender su mansión de 11 millones de dólares

El príncipe Harry y Meghan Markle quieren mudarse solo 18 meses después de comprar su mansión de 11 millones de dólares en California, porque no están «encantados» con la propiedad. En un principio compraron la casa de lujo en Montecito, un área del condado de Santa Bárbara conocida por sus propiedades privadas apartadas, para criar a Archie, de dos años, y Lilibet, de seis meses.

Pero tal y como ha revelado una fuente próxima a la pareja al diario inglés The mirror, no están entusiasmados con la propiedad, que cuenta con nueve habitaciones, gimnasio, una piscina y una pista de tenis, ni tampoco con la ubicación del elegante vecindario, a pesar de estar rodeado de varias hectáreas de pinos y cipreses.

Además, de todos estos lujos, la mansión posee 16 baños, una casa de té y un parque infantil privado. También hay una biblioteca, un spa con sauna seca y húmeda, una sala de cine, una sala de juegos, una bodega y un garaje para cinco coches. Todo ello en un terreno con jardines de rosas y una casa de invitados con dos dormitorios y dos baños.

La fuente asegura que el matrimonio ha comenzado a buscar ofertas sin revelar quienes son y mostrándose únicamente como compradores serios. Ellos se hicieron con la propiedad en 2020 por 19 millones de libras, que pagarán al anterior propietario, el ruso Sergey Grishin. Si el cambio de residencia llega a efectuarse, se unirían a un vecino de Montecito que puso su propiedad en venta por 19 millones de dólares.

La mansión de Peter Sperling, multimillonario cuya fortuna asciende a 1.6 mil millones de dólares y que es uno de los estadounidenses más ricos, contaba con siete dormitorios, trece baños, una piscina con una cabaña y dos apartamentos de huéspedes independientes con un dormitorio cada uno. Se sumó, de esta forma, a otros éxodos producidos desde que los miembros de la realeza llegaron al vecindario. El más sonado fue el del actor Rob Lowe, que decidió abandonar el barrio el pasado septiembre.

Entre los vecinos que aún permanecen al lado de Harry y Meghan se encuentran celebridades del mundo de Hollywood como Oprah Winfrey o Gwyneth Paltrow. La pareja se mudó al exclusivo vecindario cuando se produjo el sonado Meghxit y dejaron sus cargos en la realeza británica en enero de 2020.

Fue en este momento cuando Harry y Meghan abandonaron su casa de Reino Unido, Frogmore Cottage, para mudarse a California. La residencia, ubicada en Windsor, está siendo utilizada en la actualidad por la prima de Harry, Eugenia de York. Allí vive con su marido, Jack Brooksbank y su hijo August, que nació en febrero del año pasado.