La reunión secreta de Iñaki Urdangarin con la Infanta Cristina y el encuentro de Ainhoa con su marido

Este miércoles de revistas ha venido cargadito de nuevas informaciones que mucho tienen que ver con la Infanta Cristina, con Iñaki Urdangarin y también con Ainhoa Armentia, considerada como la tercera en discordia. Tanto es así, que la revista ¡Hola! ha querido plasmar en su portada el segundo reencuentro de los exduques de Palma, así como el fin de semana tan familiar que Ainhoa Armentia ha compartido junto a su marido a sus hijos, hechos que apuntan al distanciamiento entre los compañeros de trabajo y, a su vez, el acercamiento que ambos han tenido con sus respectivas parejas.

Fue el pasado viernes cuando la hermana del Rey Felipe VI y el padre de sus hijos viajaron hasta Barcelona, un destino cuanto menos sorprendente para su cita teniendo en cuenta que fue allí donde ambos compartieron los mejores años de su vida.

No obstante, es algo que no llama demasiado la atención si nos paramos a pensar que es allí donde reside Pablo, el mediano de los hijos varones del matrimonio y, dado que no habían podido reencontrarse con él desde que vieron la luz las fotografías de Urdangarin con Armentia, es probable que sus padres hayan querido aprovechar su reencuentro para visitar al que se ha convertido en su hijo más conocido.

Ambos llegaron el mismo día a la ciudad condal, pero esto no supuso que compartieran alojamiento. Nada más lejos de la realidad. La Infanta, que se trasladó a la ciudad catalana en compañía de su hija Irene, decidió hospedarse en el elegante barrio de Pedralbes, mientras que el guipuzcoano prefería hacerlo en casa de la mayor de sus hermanas, Ana Urdangarin.

Son escasos los detalles que se conocen de este esperado cara a cara del que muy pocos tenían constancia. Sin embargo, sabemos que la necesaria conversación se produjo y, aunque no ha trascendido la decisión final que podría haber tomado la expareja, el citado medio sí apunta a que con este nuevo encuentro terminó el periodo de reflexión que parece que se dieron cuando decidieron emitir un comunicado con el que anunciar la interrupción de su matrimonio. Del mismo modo, ambos tuvieron ocasión de verse con su hijo Pablo.

Los fotógrafos lo tuvieron muy difícil para conseguir fotos con las que probar que ese encuentro tuvo lugar. No obstante, sí aseguran que Iñaki y su hijo se vieron las caras en la Masía del Barça, donde Pablo estaba a punto de disputar un partido decisivo.

Lo siguiente que se ha sabido es que Urdangarin no acudió el pasado lunes a trabajar, lo que da a pensar que ha decidido alargar su estancia en Barcelona. Quizá con el propósito de demostrar a la Infanta su arrepentimiento, así como sus ganas de apostar por una segunda oportunidad. Aun así, fuentes cercanas a la hija del Rey Juan Carlos se muestran convencidos de que Doña Cristina jamás podrá perdonar esta traición a su todavía marido, ¿Qué pasará?

El fin de semana familiar de Ainhoa

Mientras tanto, Ainhoa Armentia también está tratando de recuperar a su familia, o al menos así lo ha dado a entender al disfrutar de un fin de semana de lo más agradable y divertido junto a su marido y a sus hijos. Parece que ella también se arrepiente de lo sucedido, pero según recoge la revista ¡Hola! su matrimonio ya está dinamitado y su relación con Urdangarin sigue adelante.

Después de reencuentro de Ainhoa y su marido, Manuel Ruiz, en la casa familiar, el pasado fin de semana el matrimonio volvió a juntarse con sus hijos para disfrutar del partido de fútbol del más pequeño. Y es que, contra todo pronóstico, todos se mostraron cercanos, cariñosos y de lo más sonrientes, pese a la tormenta que invade sus vidas en la actualidad. Puede que decidan poner fin a sus 19 años de matrimonio, pero que su relación sigue estando marcada por el buen rollo y el respeto es más que una realidad.

Animaron a su hijo desde la grada y una vez finalizado el partido, decidieron bajar todos juntos al campo para felicitar al pequeño por sus buenos resultados. Más tarde, abandonaron el estadio todos juntos y pasearon unidos hasta que sus caminos se bifurcaron para emprender rumbo a sus respectivas casas. Manuel se dirigió al domicilio familiar, mientras que Ainhoa se marchó a la casa de su progenitor, donde está instalada desde que se desató la polémica por sus fotografías con el exduque de Palma.