Nueva ruptura amorosa de Lara Álvarez

No se puede decir que Lara Álvarez no lo intente. Sin embargo, los novios le duran lo mismo que «dos peces de hielo en un whisky on the rocks», haciendo referencia a la famosa canción de Joaquín Sabina. La presentadora de Supervivientes, que se encuentra precisamente en Honduras grabando otra edición de este reality, suma una nueva decepción amorosa a su largo historial.

Antes de embarcarse en una nueva aventura del espacio de Telecinco, Álvarez decidió poner punto final a su relación con Davide Rey, como adelanta la revista ¡Hola! este miércoles. Por el momento no han transcendido los motivos que llevaron a la presentadora a tomar esta decisión.

No es que llevase mucho unida sentimentalmente a este italiano, nacido en Milán, que también trabaja en Supervivientes desde hace diez años. Su relación salió a la palestra a principios de año tras la publicación de unas imágenes de ambos pasando el día en la sierra de Guadarrama. Compartían mucho en común, además de su amor por la televisión. Ambos son apasionados de la naturaleza, los deportes y los animales.

Eran viejos conocidos, pero no decidieron darle una oportunidad a su amor hasta ese momento. En parte también porque Rey estuvo previamente con otra compañera del equipo de producción del espacio televisivo, con la que incluso tuvo un hijo.

Antes de Davide Rey, a Lara Álvarez se le rompió el corazón con el artista Adrián Torres y el instructor de surf Pana, al que conoció grabando una de las promociones para el programa. Los tres últimos han sido las parejas más anónimas de la presentadora, pero antes pasaron por su vida otros más mediáticos, siendo Sergio Ramos con el que más estuvo. No sin idas y venidas y una corta relación con Dani Martínez entre medias, que le duró la primavera de 2011 antes de decidir volver a intentarlo con el futbolista, marido actual de Pilar Rubio.

Con Fernando Alonso parecía que la cosa cuajaba. Incluso se habló de boda, pero rompieron en 2016 tras dos años de relación por incompatibilidad de agendas. Fue cuando apareció en su vida el empresario gallego Román Mosteiro y después Edu Blanco, con el que estuvo cerca de ocho meses.

Andrés Velencoso fue quizá uno de los que más sorprendió. Pero su historia de amor solo duró medio año. Nunca salieron a la luz los motivos. Solo unas palabras que hizo la presentadora: «Creo que soy una persona que tengo las cosas claras, sé quién soy, sé lo que quiero, sé lo que no quiero y directamente no titubeo ni pierdo el tiempo ni hago perder el tiempo al de enfrente».