Iñaki Urdangarin se derrumba: estalla en lágrimas en su coche

Es evidente que la vida de Iñaki Urdangarin no ha sido un camino de rosas. Sin embargo, cuando parecía que esta por fin le estaba dando una tregua, el exduque de Palma ha sido fotografiado llorando desconsoladamente en el interior de un coche en el que también se encontraba Ainhoa Armentia, prueba inequívoca de que, aunque muchos piensen que el ex jugador de balonmano atraviesa una de las etapas más dulces de su vida, parece que su realidad es justamente la contraria.

Iñaki Urdangarin está tratando de hacer frente a uno de sus veranos más complicados, ya que, aunque haya logrado rehacer su vida sentimental de la mano de la analista contable, lo cierto es que es el primero que pasa sin la madre de sus hijos. Un cambio de vida un tanto abrupto que, al parecer, le está pasando factura y desestabilizando a nivel emocional.

Tal y como ha publicado en exclusiva la revista Diez Minutos en su número de este miércoles, el guipuzcoano no está en su mejor momento y prueba de ello son las imágenes que complementan la información en las que se ve al exyerno del Rey Juan Carlos rompiendo a llorar en el interior de su coche mientras su actual pareja trata de consolarle y animarle.

La citada publicación recoge que este suceso ocurrió hace varios días, cuando Urdangarin se dispuso a ir a buscar a su novia al despacho de abogados Imaz & Asociados en el que trabaja. Sin embargo, en vez de estacionar en la puerta, el exduque de Palma decidió parar en una calle cercana al lugar. Allí esperó a que sus escoltas regresasen al coche en compañía de Ainhoa, a quien fueron a buscar a la puerta del despacho para después acompañarla hasta el vehículo de Iñaki.

Esta, de manera discreta y con absoluta normalidad, optó por montarse en el coche, donde, nada más subir, empezó a escuchar las explicaciones que Iñaki le daba en una actitud muy nerviosa y angustiada. Parecía algo serio e importante, puesto que, tras varios minutos, el exbalonmanista rompió a llorar de manera desconsolada.

Ella, manteniendo la calma en todo momento, decidió arroparle, apoyarle y tratar de que se tranquilizase dándole ánimos. También quiso abrazarle, pero esto no sirvió de nada, pues el exduque de Palma estuvo llorando durante veinte largos minutos. Una vez pasado este periodo de tiempo, Ainhoa se despidió de él de manera cariñosa y se bajó del vehículo para regresar nuevamente al despacho.

Los motivos que propiciaron las lágrimas de Iñaki solo él y su novia los saben, pero, según recoge la revista, estas podrían haber sido provocadas por posibles problemas con la infanta Cristina, aunque esto solo se trata de una simple suposición. Sea como fuere, lo cierto es que Ainhoa se ha convertido en el mejor apoyo del excuñado del Rey Felipe VI y en una de las pocas personas que están a su lado tanto en los buenos como en los malos momentos. Ahora bien, ¿qué le habrá ocurrido exactamente a Iñaki Urdangarin?