Shakira y Piqué no irán a juicio después de alcanzar un acuerdo por la custodia de sus hijos

Shakira y Gerard Piqué llevan tiempo tratando de ponerse de acuerdo a la hora de definir las cláusulas de su polémico divorcio. Al parecer, desde que el pasado mes de junio decidieron confirmar su separación, la cual ya se había convertido en un verdadero secreto a voces, la expareja se adentró en un procedimiento de divorcio que ambos prometieron llevar con absoluto respeto y con mucha discreción.

Pero ni la una, ni la otra. Pronto, los problemas y los desacuerdos afloraron, en su mayor parte, a la hora de decidir el futuro de sus dos hijos, Milan y Sasha. Todo parecía apuntar a que la intención de la artista era llevarse a los pequeños a Miami, donde pretendía iniciar una nueva vida con sus vástagos alejada de cualquier tipo de polémica que pudiese desencadenar su separación del futbolista catalán. Sin embargo, Piqué no estaba dispuesto a permitirlo, pues serían muchos los kilómetros que le separarían de sus hijos.

Tras varios meses intentando ponerse de acuerdo y resolver, de una vez por todas, todos los asuntos relacionados con la custodia de los menores, tal y como anunció Informalia sirviéndose del testimonio de fuentes cercanas a la expareja, sus abogados, cansados de negociar amistosamente la situación sin llegar a ninguna decisión firme, decidieron llevar el asunto a los tribunales, siendo allí donde se resolvería esta cuestión que tantos quebraderos de cabeza les ha supuesto tanto a ellos como a sus representantes legales.

Pese a todo lo comentado, ahora Vanitatis ha podido conocer en exclusiva que, finalmente, la pareja no se verá las caras en un juicio, pues, al parecer, han logrado alcanzar un acuerdo por la custodia de los niños, quienes, según apunta el citado medio, seguirán viviendo en España y yendo al mismo colegio de siempre, al menos durante el próximo curso.

Además, la publicación sostiene que los acuerdos de custodia acordados desde el pasado mes de marzo han sido respetados por ambas partes. Se han turnado sin alterar la rutina de los menores y han disfrutado con ellos de sus vacaciones cuando les ha correspondido. Piqué pasó quince días de junio con ellos y, al parecer, también pudo estar con ellos en agosto.

Vanitatis revela que lo referente a sus hijos está más que establecido y que esto era lo único en lo que tenían que ponerse de acuerdo. «No había cuestiones económicas que discutir», ya que, según el medio, durante sus 12 años de relación, ambos han mantenido una independencia económica absoluta. Han compartido gastos, pero no inversiones, es decir, que cada uno tenía su propio patrimonio sin existir ningún tipo de vínculo económico.

Esto ha permitido que en su proceso de separación no hayan existido grandes dilemas más allá de lo relacionado con la custodia de sus hijos. Un asunto que, al parecer, han conseguido solventar, dando carpetazo a todas aquellas informaciones que apuntaban a todo lo contrario. Es evidente, ambos han querido dejar a un lado el rencor y los reproches con el único objetivo de velar por el bienestar de las dos personas más importantes de sus vidas, sus dos hijos.