Íñigo Onieva vuelve a sonreír tras su ruptura con Tamara Falcó

Ha pasado más de un mes desde que salió a la luz que la historia de amor entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva había llegado a su fin, a causa de una deslealtad por parte del empresario. La pareja decidió cortar por lo sano y emprender caminos por separado tan solo unos días después de anunciar públicamente sus planes de boda.

Desde entonces, cada uno ha encontrado diferentes formas de afrontar su mediática ruptura. Así, mientras Tamara ha optado por refugiarse en su familia, en el trabajo, y cómo no, en la fe, el ingeniero ha preferido apoyarse en su madre y en algunas de sus grandes pasiones: la gastronomía y los viajes. Y es que, aunque los dos decidieron seguir adelante con sus vidas tratando de no alimentar la polémica que giraba entorno a su separación, lo cierto es que, en todo este tiempo, a ambos se les ha visto un tanto apenados por el indeseado final que ha tenido su sonado romance.

Tamara, por su parte, no ha llegado a perder nunca la sonrisa, pero de quien no se podría decir lo mismo es de Íñigo. El joven decidió reaparecer ante los medios de comunicación para volver a pedir disculpas públicamente tanto a la marquesa de Griñón como a la familia de esta, un gesto que, según varios medios de comunicación, formaba parte de su plan de reconquista. En dicha comparecencia, el empresario se mostró triste, cabizbajo y bastante alicaído, un estado anímico que también se puede apreciar en las diferentes fotografías tomadas por la prensa desde que trascendió la noticia de su ruptura.

Sin embargo, algo parece haber cambiado para el hermano de la actriz Alejandra Onieva, pues, tal y como se puede observar en las imágenes tomadas por la Agencia de Prensa Gtres durante el pasado fin de semana, este parece haber recuperado su tan característica sonrisa. ¿El motivo? Solo él lo sabe.

Íñigo fue localizado el pasado domingo paseando a sus tres perros por las inmediaciones de su domicilio en una actitud relajada, animada y, sobre todo, muy alegre. Durante todo el trayecto, el joven mostró una estremecedora sonrisa con la que probó que atrás quedó esa etapa de llantos y lamentaciones en la que se adentró cuando acabó su historia de amor con la hija de Isabel Preysler, así como lo decidido que está a seguir disfrutando de la vida como siempre ha hecho, con o sin el que dice ser el gran amor de su vida.

El ingeniero ha vuelto a sonreír y poco a poco parece que también va retomando su vida de siempre, marcada por los compromisos profesionales derivados de su faceta de empresario y por el disfrute de las pequeñas cosas, a las que siempre ha tratado de dedicar parte de su tiempo libre. Ha quedado demostrado que uno de ellos es pasar tiempo en familia, y en ella sus mascotas ocupan un lugar primordial. A la vista está.

Ahora bien, todo parece apuntar a que Onieva no es el único que ha tomado la decisión de disfrutar de su nueva etapa de soltero. Tamara también parece haberlo hecho, o al menos así lo demostró durante el concierto de su hermano Enrique Iglesias celebrado en el Doha Golf Club. Como una fan más, la marquesa lo dio todo durante el espectáculo, y fue tal lo bien que se lo pasó, que incluso quiso presumir de ello en sus redes sociales.