Rodrigo Rato, abatido y desolado en el último adiós a su hermana María Ángeles

Para tragedia, la que están viviendo Rodrigo Rato y su familia a causa del reciente fallecimiento de María Ángeles, la hermana del exvicepresidente del Gobierno. Tal y como ha adelantado OK Diario, la tía de Patricia Rato falleció el pasado lunes a los 80 años de edad de una manera totalmente inesperada, pues su muerte vino propiciada por un atragantamiento que sufrió mientras disfrutaba de una agradable comida con dos amigas en un conocido restaurante de la calle Velázquez de Madrid.

Sin duda, un duro varapalo para todos sus allegados, que, en la mañana de este miércoles, han querido brindarla un emotivo último adiós acudiendo a su funeral, el cual ha sido celebrado en el crematorio de La Almudena de Madrid. Allí ha sido donde un abatido y desolado Rodrigo se ha dejado ver frente a los objetivos. El expolítico llegaba al lugar en buena compañía para, poco después, fundirse en sentidos besos y abrazos con aquellos familiares y amigos cercanos a la fallecida que han querido trasladarle su más sincero pésame.

Entre ellos se encontraba su sobrina, Patricia Rato, que, vestida de riguroso luto y acompañada por su marido, Javier Moro, ha llegado al funeral de su tía dejándose ver también, muy afectada por la triste pérdida. Tío y sobrina se han consolado el uno al otro tanto a la entrada como a la salida del funeral, instantes en los que a ambos se les ha escapado alguna que otra lágrima.

En este trágico escenario ha sido donde la exmujer de Espartaco ha protagonizado sus primeras imágenes junto a su esposo tras su reciente boda. Un motivo de absoluta alegría al que se sumó el embarazo de su hija Alejandra, viéndose ambas noticias eclipsadas por la repentina muerte de María Ángeles Rato, la cual ha supuesto un auténtico mazazo para toda la familia.

Testigos presenciales del restaurante han desvelado a El Español que, al ver que la fallecida se estaba atragantando, sus acompañantes pidieron a gritos un médico en la sala, mientras otros intentaban realizarla la maniobra de Heimlich, aunque sin éxito. Al ver que la víctima no respondía, decidieron llamar al Samur. Al parecer, los servicios de urgencia estuvieron más de 20 minutos intentando reanimarla, pero finalmente no pudieron hacer nada por salvarle la vida. Ya se encontraba en parada cardiorrespiratoria.

María Ángeles, conocida como Mani por su entorno, era la segunda de los tres hijos del matrimonio formado por el empresario Ramón Rato y Aurora Figaredo. A nivel profesional, logró convertirse en una prestigiosa anticuaria que, además, también fue una de las fundadoras de la Asociación de Anticuarios de Madrid. Y es que, fueron tantos los éxitos cosechados en su profesión, que llegó a ser premiada con la medalla de oro de la Asociación de Anticuarios de Madrid y con la medalla de oro del gremio de Anticuarios de Cataluña.

En lo que respecta a su vida personal, se sabe que llegó a casarse dos veces, la primera con Emilio García Botín, y la segunda con José María de la Rosa, y que fruto de su relación con este último nacieron sus dos hijos, Ángeles y José, quienes también han sentido enormemente su muerte, pues a ellos, al igual que a su hermano y a su sobrina Patricia, también estaba muy unida.