El infierno de Joana Sanz, la abnegada esposa que siempre defendió a Dani Alves

Joana Sanz, la mujer de Dani Alves, está viviendo una pesadilla y ha pedido públicamente a los medios que respeten su dolor, que ahora es más intenso que nunca tras el fallecimiento de su madre, y la pena a la que podría enfrentarse su marido por la presunta violación que habría cometido. «Pido por favor a los medios de comunicación que están por fuera de mi casa, que respeten mi privacidad en este momento. Mi madre ha fallecido hace una semana, apenas he empezado a asumir que ella ya no está como para que atormenten con la situación de mi marido. He perdido los únicos dos pilares de mi vida, tengan un poco de empatía en vez de buscar tanta noticia en el dolor ajeno. Gracias», ha escrito la modelo en sus stories de Instagram.

Una vez más, Joana ha demostrado que apoya a Dani Alves de manera incondicional, algo que ha hecho durante toda su relación. La modelo y el futbolista se conocieron en el año 2015 en Barcelona, gracias a un amigo en común que presentó a la futura pareja. Se enamoraron perdidamente y sellaron su amor en París un año después, aunque no fue hasta julio de 2017 cuando decidieron organizar una discreta ceremonia en las Islas Baleares, a la que asistieron los amigos más cercanos y las familias de ambos.

Entre ellos siempre ha existido respeto y mucho espacio individual. «¿Cuál sientes que es la principal virtud que tienen como pareja con Dani? Son tan lindos!», le preguntaba por ejemplo una usuaria. «Respetamos la vida que tiene cada uno por separado. Si quiere salir y beberse hasta el agua de los floreros con sus amigos, cero problema. Porque cuando yo lo haga quiero que me venga a buscar o me coja el teléfono para ayudarme a encontrar un taxi», declaró la modelo en Instagram, en una ocasión. «Eso de las parejas/matrimonios asfixiantes en los que prohíbes cosas como si tuvieras algún tipo de autoridad sobre la otra persona no lo entiendo», ha continuado explicando en sus ‘stories’.

Siete años de amor

Sus caminos se cruzaron hace más de siete años en Barcelona, y desde entonces la pareja se ha vuelto inseparable. Joana está al pie del cañón en uno de los peores momentos del futbolista, que ha sido acusado de haber encerrado, abofeteado, insultado y violado a una joven de 23 años la noche del pasado 30 de diciembre en el baño de una discoteca de Barcelona. Se ha decretado prisión sin fianza para el futbolista.

Su mujer confesaba hace unos días: «yo sé quién es mi marido, sé lo respetuoso que es porque ni cuando me estaba conociendo a mí me faltó al respeto. He visto muchas veces cómo mujeres se acercan al reservado, atrevidas, a intentar algo con mi marido en mi cara. Si lo hacen en mi presencia no me quiero imaginar cuando yo no estoy», explicaba la modelo canaria.

Las muestras de amor de la pareja en redes sociales son continuas. El pasado mes de julio, Dani y Joana celebraban su aniversario de boda, y la influencer le dedicó unas bonitas palabras en Instagram: «Mi eterno compañero de baile». La modelo tiene que lidiar con el duelo por la muerte de su madre, y sacar fuerzas para apoyar a su marido tras los últimos acontecimientos.