El origen de la amistad entre el Rey Juan Carlos y Vargas Llosa
El Premio Nobel ha invitado al monarca a asistir a su ceremonia de acceso a la Academia Francesa
Desde que el Rey Juan Carlos se mudó en 2020 a Abu Dabi para alejarse del foco mediático, pocas han sido las ocasiones en las que hemos visto al monarca volver a Europa. La última vez ocurrió el pasado 16 de enero con motivo del funeral del Rey Constantino II, donde viajó hasta Atenas para mostrar sus condolencias.
Lo que no esperábamos es que, con menos de un mes de diferencia, Don Juan Carlos reapareciera de nuevo en público. Será el próximo 9 de febrero cuando el padre del Rey Felipe VI viajará a Paris, donde acudirá a la ceremonia de acceso a la Academia Francesa de Mario Vargas Llosa, uno de sus íntimos amigos. El escritor ha informado de que el Rey Juan Carlos se encuentra en la lista de invitados que quiere que le acompañen en un día tan especial como ese. Además, su hija, la Infanta Cristina, también estará presente en el acto.
«Siempre ha sido muy cariñoso conmigo. En las recepciones, en actos oficiales… Así que yo pensé que, como está de capa caída, de repente esta invitación le venía bien», confesaba el premio Nobel. Además, también ha explicado que el título de Rey no permite tener muchos amigos en su círculo pero que, si Don Juan Carlos pudiese tenerlos, él sería uno de ellos; «Me acuerdo mucho de él», proseguía.
La relación entre el Rey Juan Carlos y Mario Vargas Llosa nace de la pura admiración y respeto que siente el uno por el otro. Durante su reinado, el Rey Juan Carlos premió con un marquesado al escritor, con el fin de distinguirle entre la multitud como una persona ejemplar en la sociedad y reconocer su labor como maestro de las letras. Lo hizo un año después de que Mario recibiera el Premio Nobel, en 2011. Hasta el momento, y al contrario que su padre, el Rey Felipe VI aún no ha utilizado ese privilegio durante su reinado.
Cuando el escritor ganó el Premio Nobel, el entonces monarca le dedicó unas bonitas palabras por su triunfo durante un acto oficial en Oporto; «Es fantástico. Es una noticia fantástica para España. Además, él es un gran amigo de España y le quiero mucho».
Si nos remontamos a 1993, cuando Mario Vargas Llosa recibió la nacionalidad española y consiguió su visado, la primera persona a la que llamó para compartir la noticia fue al Rey Juan Carlos, dejando entrever una vez más la relación tan estrecha que mantienen.
Después de varios meses marcados por su ruptura con la reina de corazones, en unos días Mario Vargas Llosa regresará a París, la ciudad en la que se inspiró para escribir su primera novela en 1963 La Ciudad y los Perros y donde vivió con Julia Urquidi, la mujer con la que contrajo matrimonio por primera vez. Con su acceso a la Academia Francesa, el escritor se convierte en el primer latinoamericano en ingresar en dicha Academia.