El detalle de Íñigo Onieva que demuestra su dejadez con Tamara Falcó

Después de unos meses protagonizados por la infidelidad y el metaverso, parece que el amor se impone de forma definitiva para Tamara Falcó e Íñigo Onieva. La pareja, que lleva las últimas semanas realizando románticas escapadas a lo largo del globo, tiene ya hasta fecha de boda: el 17 de junio. Ante tanta buena nueva con reconciliación definitiva de por medio, la marquesa de Griñón acudió como cada jueves a El Hormiguero y, una vez más, fue el tema de conversación por confesar algunos detalles de su enlace.

Una boda que celebrarán en El Rincón, el palacio que heredó de su padre cuando falleció, y que, sin duda, se convertirá en una de las más monetizadas de la historia aristocrática española –y de Hola–. Ella, por ahora, confiesa estar «muy contenta. Me caso con el hombre al que quiero». Pero, ¿él la quiere tanto como dice? Un detalle revelado en El Hormiguero hace especular sobre cierta dejadez en su relación con Tamara.

Al parecer, durante su viaje a Finlandia, el empresario volvió a pedirle matrimonio y lo hizo con un anillo distinto. Sin embargo, se confundió en la talla del mismo y eligió una más grande que el dedo de La marquesa. «¿Pero no se sabe la talla de la otra vez?», preguntaba Pablo Motos, sorprendido. Teniendo en cuenta que es la segunda vez que se lo pide y que debería `intentar ganar puntos´ ante la infidelidad, bien podría acordarse de la talla que luce Tamara Falcó en su dedo anular.

Dani Alves, sin el apoyo de Joana Sanz

Algo ha debido cambiar en Joana Sanz para que, de un día para otro, elimine todas las fotos que tenía en Instagram con Dani Alves. Tan solo ha dejado una publicada y, casualmente, se trata de una campaña publicitaria en la que aparecían los dos. Por tanto, hubiese querido borrarla, tampoco habría podido.

En épocas de internet y redes sociales, un simple hecho como este no hace más que demostrar que la modelo ha dejado de apoyar públicamente al que hasta ahora era su marido. A los pocos días de la muerte de su madre por un cáncer, la persona que era su brújula y guía; Dani Alves se enfrentaba a una denuncia que lo implicaba directamente en un caso de agresión sexual a una mujer en una discoteca de Barcelona.

«He perdido los únicos dos pilares de mi vida, tengan un poco de empatía en vez de buscar tanta noticia en el dolor ajeno. Gracias», comentaba ella.

Luis Miguel y Paloma Cuevas

Lo de Luis Miguel y Enrique Ponce bien podría identificarse con el tema Dos hombres y un destino que tan popular hizo David Bustamente. En este caso, la protagonista en cuestión no es otra que Paloma Cuevas. Tintes de culebrón de por medio –por la supuesta traición de uno de tus mejores amigos tras comenzar a salir con tu exmujer–, al parecer el torero se enfrentó vilmente con el cantante puertorriqueño en un restaurante de Madrid al que también acudió la modelo.

Según han relatado, coincidieron en el local y el artista se acercó a saludar al torero pero éste se lo negó. «No me dirijas la palabra porque no eres mi compadre», le dijo la pareja de Ana Soria. Fue tal la tensión del encuentro que Enrique Ponce dio un golpe en la mesa y derramó una copa de vino, momento en el que intervinieron los guardaespaldas del artista para ver qué estaba ocurriendo.

Desde luego, al diestro no le ha sentado nada bien la nueva relación de su exmujer ni sus escapadas románticas. La última, en jet privado a Bilbao y rodeados de amigos para disfrutar de una comida en el Asador Etxebarri, uno de los más destacados del país.