Norma Duval: «Soy residente en Suiza, pero quiero pagar mis impuestos en España»
Ha bajado cientos de escaleras con stilettos altísimos y cubierta de plumas. Ahora se pasea por el mundo con sus zapatos de tacón
Es la primera vez que Norma Duval diseña algo y han sido zapatos. No sabe los que tiene porque nunca los ha contado pero sí que cuando alguno le gusta los compra a pares para tener un ejemplar en cada casa. Hace tres años se topó con la firma de Elche, Mysoft y con ellos ha diseñado una colección de dieciocho pares de zapatos para invierno y verano. El taconazo y el stiletto se han quedado para los eventos. «Es la primera vez que me lanzo a diseñar algo pero no lo que se espera de mi imagen, sino los que por mi edad utilizo. He creado mi colección con los zapatos confortables que quiero y con suela antideslizante».
–¿En su casa hay conflicto con los armarios?
–Ningún conflicto. Yo no acaparo ninguno porque mi marido tiene su vestidor y yo tengo el mío, tanto en Suiza como en España. No hay conflicto de espacio porque Matthias tiene sus cosas y yo las mías.
–¿Será su primer San Valentín como señora Kühn?
–Sí, pero no lo pasaré con él porque estaré en Ronda apoyando a un amigo pintor pero luego Matthias y yo nos iremos de viaje por ahí. No pasa nada porque San Valentín es todos los días y aunque no estemos fisicamente juntos estamos conectados permanentemente.
–A raíz de la boda ¿ha modificado la nacionalidad?
–La nacionalidad no, pero sí la residencia porque al mes de casarnos me dieron la residencia en Suiza porque es donde vivimos aunque yo esté viajando de un lado a otro.
–¿También hace como la baronesa Thyssen y pasar 183 días fuera de España?
–No, para nada. Yo estoy yendo y viniendo pero mi declaración de la renta y mis impuestos los voy a pagar en España aunque sea residente en Suiza. Quiero colaborar con mi país yo no quiero escaquearme de nada. Me niego en rotundo, soy española y cotizo en mi país aunque resida en el extranjero.
–Es curioso que su ruptura con Matthias haya sido tan positiva.
–Fue genial y necesaria. La ruptura fue un reajuste. Era necesario romper para partir de nuevo con todo solucionado. No sabes qué felices somos.
–Entonces, ¿entiende a Tamara Falcó?
–Por supuesto, soy pro Tamara. Es muy buena nena. Defiendo lo que ha hecho y la entiendo. El chico le ha pedido perdón porque cometió un error pero nadie es perfecto y ella le ha perdonado y ahora estamos locos porque tenga un bebé, un varón guapísimo y que sean felices.