Las últimas y duras palabras de Laura Boyer sobre Isabel Preysler antes de morir

Hace tan solo unos días, la familia Boyer se vestía de luto para despedir a Laura Boyer, quien fallecía a los 57 años de edad víctima de un cáncer. Para sorpresa de todos, apenas unas semanas antes de fallecer, la hija de Miguel Boyer concedió una entrevista a la revista Semana donde no dudó en compartir, como nunca antes lo había hecho, sus inquietudes y su mala relación con Isabel Preysler.

«Siempre he querido hablar, lo que pasa es que no estaba en disposición porque mis hijos eran muy pequeños o tenía problemas con mi exmarido. Había muchos frentes abiertos y no quería abrir más», comenzaba a relatar Laura, a lo que proseguía justificando sus declaraciones, explicando que los niños ya eran mayores de edad y que sus problemas avanzados de salud le habían aumentado sus ganas de hablar públicamente.

Acto seguido y sin pelos en la lengua, la reciente fallecida comenzaba a hablar sobre la relación que mantenía con la que un día fue la mujer de su padre, Isabel Preysler. «He tenido relación con Isabel, pero con muchísima hipocresía. Ahora no tenemos relación. Para mí es una persona hiperposesiva que alejó a mi padre», sentenciaba.

Laura resaltaba lo mucho que le dolió ver a su madre pasarlo mal tras la ruptura con su padre y tacha a Preysler como la verdadera culpable de que su familia se terminara de romper por completo. Bajo su opinión, Miguel Boyer se enamoró perdidamente de los encantos de la reina de corazones, algo que le llevó a hacer alguna que otra «metedura de pata» como poner la casa al nombre de Isabel, a lo que añadía el poco tiempo que compartían juntos: «Mi padre nos veía a mi hermano y a mí a solas, en algún restaurante y poco tiempo».

A pesar de que la llegada de Preysler a sus vidas ocasionó grandes estragos en su familia, la mayor del clan Boyer ha contado que la noticia de que su padre se casara con la madre de Tamara Falcó no fue tan traumática como lo fue la llegada de su hermana pequeña, Ana Boyer, reconociendo que la idea de ser uno más en la familia no le gusto en absoluto.

La nula relación que siempre ha existido entre Ana y Laura tiene una única culpable para la primogénita de Miguel; Isabel Preysler. Según la entrevistada, la socialité nunca facilitó que existiera una buena armonía entre ella y su hermana, de hecho, ha comentado que ella siempre procuraba felicitarla en fechas especiales como su cumpleaños o la Navidad. Aun así, ha recalcado que el resto de los hijos de Isabel siempre se ha portado «maravillosamente» con ella. «Como me notaban incómoda con su madre, intentaban ser especialmente agradables». La última vez que habló con su hermana Ana fue a raíz de la herencia de su padre. «Hablamos poco, pero se puso de parte de su madre. Ana nunca ha sido tan simpática como sus hermanos».

Finalizando la entrevista, Laura Boyer dejó bien claro que no tenía ningún tipo de interés en tener una conversación con Isabel Preysler: «No tiene nada que ver conmigo, somos la noche y el día». Y es que, a pesar de que la hispano-filipina fue la mujer que acompañó a su padre en sus últimos meses de vida, Laura nunca la ha aceptado; «En mi opinión ella no le cuidó nada, le puso un montón de gente, pero ella no le cuidó».

Por último, Laura se sinceraba sobre el odio que ha tenido a Isabel durante todos estos años, explicando que a raíz de que su padre su muriera, este sentimiento negativo hacia ella creció: «Mientras él vivió solo la tenía como una enemiga», concluía.