Mario Vargas Llosa, con su exmujer Patricia y su hijo Álvaro, con su pareja Nada Chedid
La segunda luna de miel de Mario Vargas Llosa
El escritor ha celebrado el cumpleaños de su hijo Álvaro en Lima junto a su exmujer Patricia Llosa
Pharos es un restaurante ubicado en el espigón sur de la Marina Club de Lima con vistas a los yates atracados y un infinito horizonte azul. En su carta abundan los platos de mar, tanto nacionales como españoles. Este lugar ha sido el elegido por la familia Vargas Llosa este domingo para disfrutar de un almuerzo al aire libre, en un día de sol radiante. Una reunión que sirvió para prolongar la celebración del 57 cumpleaños de Álvaro Vargas Llosa, el sábado.
Mario Vargas Llosa viajó a Lima hace dos semanas, el 2 de marzo, con motivo de la boda de su nieta Josefina Vargas Llosa. El enlace se prolongó tres días. Durante su estancia, el escritor regresó a la casa de su exmujer Patricia Llosa, en el barrio costero de Barranco. Allí volvió a trabajar en el que durante tantos años fue su despacho antes de que Isabel Preysler se cruzase en su camino. «Escoltado por el Pacífico, en el escritorio donde escribió Historia de Mayta y tantas más», rememoraba su hijo en su cuenta de Twitter.
El 8 de marzo la familia al completo volvía a arropar al escritor durante la entrega del collar de la Orden del Sol de la mano de la presidenta peruana, Dina Boluarte. Su primogénito volvió a escenificar la unidad familiar, compartiendo otra imagen de sus padres juntos.
Mario Vargas Llosa, con su familia y la presidenta de Perú
Dos semanas después, Mario Vargas Llosa permanece en Lima. El escritor valora la estabilidad y el tiempo en familia que ha recuperado tras su ruptura con la reina de corazones.
En la última imagen que compartía Álvaro Vargas Llosa en el fin de semana de su cumpleaños se sucedían los comentarios de enhorabuena, al ver de nuevo al exmatrimonio junto. «Bonita postal con su verdadera familia», «Patricia, una mujer peruana digna, resiliente, fuerte, pero, qué madre tan extraordinaria tienes, ella es la calma, el reposo, la dicha del escribidor. Ojalá permanezcan siempre juntos».
El matrimonio cumplió 50 años de casados, justo antes de su divorcio tras la irrupción en escena de Isabel Preysler. A Patricia Llosa la conoció en su juventud y ha permanecido junto a él durante toda su carrera literaria. Era la persona que se encargaba de gestionar la economía familiar, la agenda del escritor, sus viajes y en definitiva, de hacerle la vida más fácil. También es la madre que ha criado con esmero a sus tres hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana.