Harry y Meghan, en un todoterreno
Versiones contradictorias en el relato de la persecución en coche de Harry y Meghan
La Policía, la prensa y un taxista cuentan una historia mucho menos dramática que la de los duques de Sussex
El Príncipe Harry y Meghan Markle aseguran que este martes fueron víctimas de una persecución «implacable» por las calles de Nueva York. Dos horas de acoso, según su versión, a manos de los paparazzi que les seguían en coche y que pusieron en peligro tanto la vida de los duques de Sussex como la de la Policía y los transeúntes que por allí pasaban. Una experiencia que para Harry ha sido «lo más cercana» a comprender lo que pudo sentir su madre cuando murió en 1997.
El relato a manos de la pareja de Montecito da para otra serie de Netflix, pero... ¿Qué ocurrió realmente? Tanto la Policía de Nueva York, como los testigos, algún fotógrafo que prefiere permanecer en el anonimato y un taxista que llevó a Harry y Meghan en una parte del trayecto, han puesto en duda la descripción inicial de los hechos. Es más: cuestionan que las vidas de los duques de Sussex estuvieran en peligro.
El taxista
Sukhcharn Singh, el taxista que llevó al duque y la duquesa de Sussex en una parte de su viaje del martes por la noche, afirma que los paparazzi los seguían, pero no comparte esa valoración «casi catastrófica» que dan Harry y Meghan.
«La ciudad de Nueva York es el lugar más seguro: hay comisarías y policías en cada esquina, así que no hay razón para tener miedo», explicó Singh, quien hizo hincapié en que nunca sitió que su vida corriera peligro. El conductor descartó esa versión que se quiere dar de que el incidente del martes fue como una persecución de película.
La prensa
Los fotógrafos acusados de conducir de forma temeraria han ido un paso más allá, afirmando que los irresponsables al volante eran los guardaespaldas que llevaban el gran 4x4 negro del matrimonio.
«Cuando lees el relato, asumes que fue como una película de Fast and the Furious en medio de la ciudad de Nueva York, que sabemos que se mueve a la velocidad de un caracol», comentó Omid Scobie, autor de una biografía sobre el duque y la duquesa de Sussex.
El Príncipe Harry y Meghan Markle, en Nueva York,
Lo que Scobie visualiza al leer la versión de Harry y Meghan es «una especie de juego del ratón el gato: a veces Harry y Meghan se encontraba en medio del tráfico rodeados de fotógrafos en bicicleta y coches detrás de ellos, y luego había momentos en que el camino estaba despejado y el vehículo de los duques iba deprisa tratando de despistar a la gente que los seguía».
La agencia de noticias de celebrities Backgrid, que filmó de cerca a Harry y Meghan, también puso en entredicho su versión de los hechos.
La Polícia
Desde la Policía de Nueva York han enviado un comunicado en el que se resta importancia a cualquier descripción dramática de los hechos. Aseguran que efectivamente los fotógrafos hicieron que el viaje fuera «desafiante» para los Sussex, pero confirmaron que no hubo ni colisiones, ni heridos ni arrestos.
Estos nuevos relatos surgen después de que la portavoz de la pareja, Ashley Hansen, echara más leña al fuego al afirmar que los duques estaban aquella noche «increíblemente asustados y conmocionados».
Hansen también alegó que la Policía tuvo que confrontar a los fotógrafos y pedirles espacio en múltiples ocasiones, pero que «ese deseo no fue respetado».