El altercado en una tienda con el que Arturo Valls conoció a su mujer

Arturo Valls se ha convertido en uno de los presentadores más icónicos de nuestro país. Su rostro ha sido imagen de numerosos programas televisivos que han pasado a la historia de la pequeña pantalla. Su don de genes y su desparpajo ante las cámaras le han hecho llevar a sus espaldas una larga e intachable trayectoria audiovisual.

Nació el 24 de marzo de 1975 en Valencia y su pasión por la comunicación estuvo vigente desde sus primeros años de estudios. Decidió comenzar la carrera de periodismo en su ciudad natal, pero con 20 años, las ganas de comenzar a ponerse frente a los focos le motivaron a empezar a combinar sus estudios con el reporterismo. El magacín A la luna de Valencia presentado por Laura Pérez fue su primer proyecto profesional y de ahí, su carrera es historia. Fue uno de los programas más vistos de 1997 y junto a Carmen Alcayde, su compañera de plató, consiguió un gran empujón para su futuro laboral.

Han pasado tres décadas desde aquella «escuela de vida» y Arturo Valls ha conseguido un gran reconocimiento profesional por parte de la mayoría de los telespectadores. Desde su faceta de actor en series como Camera Café hasta su rol como presentador en programas como Mask Singer o Ahora caigo son alguno de los hitos que han marcado su carrera. Aquel joven periodista que dio el salto a reportero y dejó su tierra natal por dedicarse a su vocación ha conseguido consagrarse como uno de los rostros más queridos y conocidos de nuestro país.

Sin embargo, más allá de su figura televisiva, Arturo Valls siempre ha intentado llevar su vida privada desde los hilos más herméticos posibles. Hasta donde se sabe, lleva más de diez años con su mujer Patricia María Santiveri a la que conoció de una manera muy anecdótica a raíz de un altercado con su cuñada en una tienda. Según ha narrado, el presentador tropezó con una chica en un establecimiento y, en modo de disculpas, le acompañó hasta el coche. Allí estaba la hermana de esa desconocida que, sin imaginárselo, acabaría convirtiéndose en la mujer con la que se daría el «sí, quiero» en 2009 y con la que compartiría su vida.

Juntos han formado una familia en la que tienen un único hijo en común llamado Martín. Según ha declarado en más de una ocasión, su paternidad ha sido una de las cosas más bonitas que ha experimentado en su vida: «¿Tú sabes lo bonito que es despertarte y escuchar ‘hola, papi’? Y cuando vuelves a casa del trabajo que te dé un abrazo… Eso hace que se te pasen todos los males», sostenía hace tan solo unos años públicamente.

A pesar de evitar hablar de su familia, el presentador ha comentado en alguna ocasión que su fama la sobrellevan de la mejor manera posible, aunque señala que a su hijo le costó más asimilarlo en un principio. No obstante, siempre ha explicado que se siente muy apoyado por los dos en cualquier proyecto profesional al que se enfrenta.

Su lado cómico y bromista es muy característico del presentador y, al parecer, es algo que le viene de familia. Siguiendo las palabras que ha utilizado en alguna que otro momento, su referente artístico siempre ha sido su padre ya que era una persona que no tenía ningún tipo de vergüenza a la hora de hacer reír a la gente.

Más allá del humor y la comunicación, Arturo Valls es un fanático del ciclismo. El valenciano forma parte del equipo de Imparables, con el cual ha recorrido grandes distancias sobre ruedas como el Camino de Santiago o rutas de larga duración por Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Y es que conocer mundo es otro de sus hobbies. Se le puede considerar como un viajero empedernido ya que siempre que tiene oportunidad se escapa a cualquier parte del mundo junto a la mejor de sus compañías: su mujer y su hijo.