Kike Sarasola y Carlos Marrero se separan: ¿quién se queda con los dos niños?

Kike Sarasola y Carlos Marrero han decidido poner fin a su historia de amor tras más de 30 años juntos, de los cuales 16 han formado un matrimonio. Así lo ha confirmado a Vanitatis uno de los protagonistas, quien aseguran que el principal motivo de su ruptura viene de la mano de un desgaste que no han sido capaces de superar: «Es una situación triste porque cualquier ruptura supone momentos complicados y más cuando nos seguimos queriendo. […] No hay terceras personas en nuestras vidas», explica Kike Sarasola. Por otro lado, ha señalado que, bajo su punto de pista, la pandemia del coronavirus también causó ciertos estragos en el matrimonio: «El covid nos ha pasado factura y necesitamos nuestro espacio y tiempo para cada uno», decía.

El deportista ha insistido en que a pesar de los problemas que hayan propiciado este triste desenlace de su relación, el proceso de separación siempre se ha realizado desde las bases de la amistad y el cariño que se tienen entre ellos después de tantos años compartidos. Ambos tienen dos hijos en común y, por su bien, seguirán compartiendo momentos en familia: «Vivimos muy cerca y, por lo tanto, no hay problema para el tema de la vida cotidiana de los niños».

Niños juntos

Los menores nacieron a través de la gestación subrogada y tras conocerse la noticia de la ruptura de sus progenitores, uno de los aspectos que más se está comentando es el hecho de cómo se organizaran en cuanto a la custodia. A diferencia de lo que ocurrió en el caso de Miguel Bosé y Nacho Palau, los pequeños de la casa no serán separados por sus padres. Siguiendo estas mismas líneas, la intención de Kike Sarasola y Carlos Marrero no sería separar a sus hijos en función de cuál de ellos es su descendencia biológica. Su entorno asegura que los niños pasarán una semana sí, y otra no, en la vivienda de cada uno.

De acuerdo con el medio mencionado, además de su organización con sus vástagos, Marrero y Sarasola seguirán trabajando juntos en la cadena hotelera de Room Mate. El primero cumplirá con su puesto como vicepresidente y el segundo como presidente de la entidad. Una hermana de Carlos Marrero, Elena Marrero, también mantiene un gran cargo en la empresa, la cual, a pesar del divorcio, también seguirá formando parte de la plantilla de la compañía.

Sarasola ha querido dejar la puerta abierta a una posible reconciliación dejándolo todo «en manos del tiempo» ya que lo considera «el mejor aliado» en estos casos: «Son treinta años que hemos pasado juntos y felices», concluye. Kike Sarasola y Carlos Marrero se casaron el 26 de octubre de 2006 en Madrid. En su lista de invitados destacaba la presencia de grandes figuras de la esfera pública del país como Felipe González o Begoña Martínez de Irujo. La pareja nunca escondió su homosexualidad y su boda fue, en parte, pionera en apoyar la ley de matrimonios homosexuales en España.