Así es el monje budista al frente del caso de Daniel Sancho

La policía tailandesa considera que Daniel Sancho acabó con la vida de Edwin Arrieta de forma premeditada el pasado miércoles 2 de agosto, y por eso ha pedido que el juez le condene a pena de muerte. Las autoridades han concedido una rueda de prensa para zanjar las dudas que circulan en los medios de comunicación y Surachate Hakparn, subdirector de la policía de Tailandia, ha declarado que «no fue un accidente», sino que «hubo premeditación». Insiste en que el hijo de Rodolfo Sancho debe recibir una condena contundente: «Tenemos suficientes pruebas para que un tribunal lo condene», comentaba durante la rueda de prensa.

Surachate Hakparn es conocido como Big Joke, que en español significa «gran chiste». Ha recibido este apodo debido a su carácter bromista y a la buena relación que mantiene con todos sus compañeros. Es un rostro muy conocido entre las autoridades tailandesas y ha destacado por un ascenso acelerado en la cadena de mando. Fue subinspector a los 24 años, superintendente a los 38 y general mayor a los 45.

El agente se encargó del caso cuando sus compañeros encontraron las bolsas con los restos mortales de Edwin Arrieta en Koh Pangham, pero después lo dejó todo en manos de las autoridades locales. Al ver la repercusión que se estaba generando en torno al asesinato de Edwin, volvió a tomar las riendas para cerrar la investigación.

Su carrera

Surachate Hakparn ha sido muy contundente con Daniel Sancho y asegura que tiene pruebas suficientes para demostrar que acabó con la vida de Edwin Arrieta de forma premeditada, circunstancia que agrava su situación. El policía ya ha resuelto otros casos importantes, como el de la mujer de Arabia Saudí que se atrincheró en el aeropuerto de Bangkok. Su intención era pedir asilo político en Australia alegando que estaba siendo maltratada por su familia. Finalmente, y gracias a la intervención de Hakparn, la mujer pudo llegar a su ansiado destino.

También tomó las riendas del caso de Am Cianuro, una mujer que fue acusada de acabar con la vida de 13 personas. Pero eso no es todo. Ha ocupado multitud de puestos que le han dado muy buena fama y le han ayudado a convertirse en un referente en Tailandia. Ha sido comisario de la Policía Turística, comandante de la Oficina del Comisionado General y responsable de la Oficina de Inmigración.

Trágico episodio

Big Joke, como le conocen sus compañeros, vivió un episodio en 2020 que le hizo cambiar de vida: su coche fue tiroteado. Afortunadamente él no se encontraba en el interior, pero después de descubrir lo que había pasado decidió marcharse a la India. Allí se hizo monje budista. Este suceso dio mucho de qué hablar en Tailandia y surgieron todo tipo de rumores. Algunos decían que se había retirado por miedo, otros porque necesitaba tomar distancia de su profesión y otro grupo le acusó de estar relacionado con un caso de corrupción.