Gente
La condición de Carlos III al Príncipe Andrés para permitirle vivir en palacio
El Duque de York ha llegado a un acuerdo con el Rey Carlos III, pero tendrá que asumir los costes de la reforma
Buenas (y costosas) noticias para el Príncipe Andrés. El Rey Carlos III ha dado luz verde a que su hermano pueda seguir viviendo en la que ha sido su residencia los últimos años, el Royal Lodge (Windsor), en lugar de obligarle a instalarse en Frogmore Cottage. Movimiento que se ha producido después de que el monarca y el Duque de York hayan mantenido una reunión en Balmoral, en la que el Duque se ha comprometido a acometer la serie de trabajos de reforma que necesita la propiedad, a pesar de que ya no cuenta con la subvención de la Corona que sí le proporcionaba su madre, la Reina Isabel.
Carlos III no ha pedido a su hermano explicaciones sobre cómo piensa asumir dichos costes, pero éste le confirmó que podía hacerse cargo, según revelaron fuentes cercanas a la Familia Real británica. Sobre la mesa estaba la opción de que el Príncipe Andrés recurriera a la herencia de su madre, de la que no se tienen detalles porque su testamento es secreto y está blindado, para poder financiar estas reparaciones. Finalmente, será su exmujer, Sarah Ferguson será quien le brindará, una vez más, todo su apoyo. Según se estima, los costes de los cambios de la vivienda podrían ascender a 2 millones de libras (2.309.060 euros). La Duquesa siempre ha estado al lado del Príncipe, por lo que no es de extrañar que le ayude en estos difíciles momentos económicos. De hecho, vive habitualmente con él en el Royal Lodge.
The mirror ha confirmado que la Duquesa de York será la que ayudará al Príncipe Andrés a afrontar los costes derivados de las reparaciones más urgentes que necesita la casa. Ante la posibilidad de desalojo, Sarah Ferguson quiso estar al lado del padre de sus hijas. Un amigo de la madre de las Princesas Eugenia y Beatriz de York ha comentado al citado medio que, cuando Sarah está en el Reino Unido se queda en el mismo domicilio que el hermano del Rey, donde, por cierto, pasó toda su convalecencia tras su reciente intervención quirúrgica a consecuencia de un cáncer de mama que le diagnosticaron a principios de año.
Al margen de cuestiones prácticas, dado que un traslado a Frogmore supondría un cambio de vida para Andrés porque implicaría que tendría menos espacio para él y su entorno, lo cierto es que las mismas fuentes han asegurado que la ayuda de Sarah se debe más a un tema personal y al vínculo que ambos han ido creando con el paso de los años. Ferguson es consciente de que, para el Príncipe, el hecho de ser desalojado de su casa supone un duro golpe para él, motivo por el que está dispuesta a prestarle toda la ayuda que sea necesaria.