Los becarios de Nacho Cano denuncian a la Policía por presuntas coacciones
Los becarios describen cómo un grupo de 20 policías irrumpió en el recinto del musical el 27 de junio para realizar una inspección laboral
Los becarios de Nacho Cano, involucrados en su musical Malinche, han interpuesto una querella contra la Policía Nacional, alegando presiones y falsificación de documentos. Según los becarios, los agentes les intimidaron con amenazas para que acusaran a Cano de acoso sexual y explotación laboral.
Estas denuncias, accesibles a través de El Mundo, se centran en los interrogatorios del 27 de junio. Una querella específica afirma: «Fui forzada a declarar en circunstancias que no me permitían tomar decisiones adecuadas, con comentarios amenazantes que coartaban mi libertad». Otra becaria mexicana explica que no fue informada adecuadamente y que el acta de su denuncia contiene declaraciones que ella no realizó. Pese a expresar su desacuerdo, los agentes no hicieron correcciones, sugiriendo que parte de su declaración fue alterada.
Esta becaria, participante en el musical Malinche, se encuentra en España gracias a un programa de becas para formarse como bailarina. Este programa combina formación con la participación en el elenco del musical y, según la becaria, es completamente legal y aceptado voluntariamente con la intención de dedicarse profesionalmente al espectáculo.
Los becarios describen cómo un grupo de 20 policías irrumpió en el recinto del musical el 27 de junio para realizar una inspección laboral, basada en la denuncia de una exbecaria que había dejado el proyecto meses antes. Relatan que los agentes los trataron como delincuentes, prohibiéndoles la comunicación entre ellos o el uso de teléfonos móviles, y los mantuvieron separados en distintas dependencias. Después de varias horas, fueron trasladados a la comisaría de Leganitos, donde los agentes intentaron obtener declaraciones falsas sobre Nacho Cano.
Además, los becarios denuncian que los agentes los amenazaron con deportación si no cooperaban y les preguntaron si Cano se había insinuado sexualmente o los había maltratado laboralmente, algo que negaron. Acusan a la Policía Nacional de detención ilegal, amenazas de deportación, intervención no autorizada de sus dispositivos móviles y reenvío de comunicaciones privadas a dispositivos de los agentes.
En las querellas, los becarios también señalan que las actas de declaración fueron alteradas. «Las actas contienen circunstancias que no he afirmado, reinterpretan mis respuestas y agregan cuestiones que no guardan relación con lo realmente manifestado», comenta otro denunciante. Según ellos, los agentes modificaron y reinterpretaron sus declaraciones para incriminar a Nacho Cano.
Estos hechos han generado una gran polémica y cuestionan la actuación de la Policía Nacional en este caso. Los becarios insisten en que su estancia en España y su participación en el musical Malinche son legales y voluntarias, y que las acusaciones contra Cano no tienen fundamento. La querella contra la Policía Nacional podría tener repercusiones significativas en el desarrollo del caso y en la percepción pública de la investigación.
Nacho Cano, por su parte, ha negado todas las acusaciones y ha recibido apoyo de la comunidad artística. Tras su liberación provisional, ofreció una rueda de prensa, dejando claro que este será el comienzo de un largo proceso legal, donde las acusaciones y defensas se enfrentarán para esclarecer los hechos y determinar la justicia en este polémico asunto.