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Los Reyes, con sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, en su posado habitualGTRES

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De Marivent a Son Vent: los refugios de la Familia Real en Mallorca

Su traslado a la isla balear marca el inicio de sus vacaciones

El verano de la Familia Real española está históricamente relacionado con la isla de Mallorca. El lugar en el que los Borbón se dejan ver de manera casi despreocupada y en el que, en los últimos años, se han visto las estampas más familiares de este clan, que no pasa por sus años de mayor unidad.

La llegada de Felipe VI y los suyos a uno de los destinos de verano más cotizados del país se asocia siempre con el arranque de sus vacaciones. La Familia Real se aloja en un lugar de ensueño durante sus estancias en la capital de Baleares, teniendo dos residencias principales, separadas, pero dentro del mismo recinto: Marivent y Son Vent.

El palacio de Marivent es, oficialmente, la residencia de Don Juan Carlos y Doña Sofía en la isla. Allí han pasado los veranos junto a sus tres hijos cuando estos eran pequeños, y allí continúa instalándose, verano tras verano, la Reina Sofía. El palacio, cedido a los Borbón en 1973 por el Gobierno Balear, cuenta con seis habitaciones, cuatro cuartos de baño y varios despachos y salones distribuidos en dos plantas. El terreno sobre el que está construido Marivent ocupa 33.000 metros cuadrados y se sabe que la finca cuenta con helipuerto y con una masía que hace las veces de residencia para el servicio doméstico de la Casa Real, contando además esta construcción con una sala de prensa.

Aunque no consta en las informaciones que había sobre el Palacio antes de que pasase a formar parte del circuito de residencias reales de nuestro país, se ha publicado que Marivent cuenta también, en sus terrenos, con varios apartamentos para los funcionarios y el equipo de seguridad de la familia, además de con dos casas individuales de las que disfrutan las Infantas Elena y Cristina cuando se alojan en Mallorca.

Felipe VI y doña Letizia, acompañados por la Reina Sofía, ofrecen la tradicional recepción en MariventEFE

El caso del Príncipe es otro, ya que, en 1992, Gabriel Cañellas Fons, entonces presidente de la comunidad Balear, le regaló la masía de Son Vent. La construcción, cuyos terrenos colindaban en un punto con los de Marivent, resultaba perfecta para darle al futuro Rey de España la privacidad que a buen seguro iba a empezar a necesitar, y la situación actual entre los miembros de la familia Borbón deja patente que la decisión fue de lo más acertada.

Al contrario de lo que ocurre con Marivent, Son Vent no ha sido nunca fotografiada y no hay apenas datos de cómo es la casa en la que Don Felipe, Doña Letizia y sus hijas pasan sus días en Mallorca. Se sabe que la residencia ha sido reformada en dos ocasiones, la primera al pasar a ser propiedad de los Borbón y la segunda en 2004, supervisada esta por la actual Reina.

Se sabe que Marivent y Son Vent están comunicados, al menos lo estaban antes de pasar a ser las residencias estivales de la Familia Real. Si cuando están allí todos comparten lugares comunes o hacen vidas completamente separadas, como se presupone que hacen en el palacio de la Zarzuela, es una incógnita que parece imposible resolver.