Jacuzzi, parque infantil y helipuerto: Amancio Ortega estrena megayate de lujo de 300 millones

Hay pocas personas en España que puedan permitirse adquirir una propiedad de 300 millones de euros y una de ellas es Amancio Ortega. El magnate textil amante de los barcos acaba de hacerse con una de las embarcaciones más lujosas del mundo. Bajo el nombre de Project 1012, este nuevo yate que ha encargado a la naviera especializada Feadship posee 90 metros de eslora y un motor híbrido, el primero en gozar de la tecnología híbrida «con un paquete de batería de 1 MW».

No solo cuenta con lo último en tecnología y enseres de súperlujo, sino que, además, puede ser personalizado en su totalidad a gusto del comprador. Algo que no es de extrañar teniendo en cuenta que su precio total ha sido de 300 millones de euros y que dispone de 564 metros cuadrados, distribuidos en tres alturas, cada una de ellas con su propia cubierta para disfrutar cuando el tiempo acompaña.

«El exterior se ha diseñado meticulosamente con aportes muy específicos del propietario», explican desde la página web de Feadship. El interior, en cambio, está diseñada para que sea una casa sobre el agua familiar, discreta, pero meticulosamente detallada. De hecho, el encargado de toda la decoración corre a cargo del prestigioso De Voogt, que le aporta la luminosidad y confortabilidad a base de bonitas piezas de diseño, moquetas y varias obras de arte, como óleos y esculturas.

De esta forma, el navío posee un aspecto moderno y sofisticado donde destacan los muebles de madera y los tejidos naturales. Además, dispone de nueve camarotes dobles a los que nos les falta ningún tipo de detalle y alojamiento para 18 miembros de la tripulación, incluido un camarote extra para el capitán y ocho adicionales en la cubierta inferior.

No obstante, «una de las razones por las que el propietario decidió construir este yate fue para tener el beach club más espacioso posible», afirman desde la compañía de barcos de lujo. De hecho, este ocupa una cuarta parte de la longitud continuando hacia el interior de la cubierta inferior, con una sala de estar adicional y otra terraza abatible en el lado de estribor. Cuenta además con unas alas plegables gracias a las cuáles las superficies aumenta en un 80 % creando alrededor de 165 metros cuadrados de espacio para descansar a nivel del agua.

Por si fuera poco, la embarcación también cuenta, entre la sala de máquinas y el beach club, con un garaje lateral con espacio para dos embarcaciones auxiliares de 10 metros, una lancha de esquí náutico y todo tipo de divertimentos acuáticos como tablas de windsurf, kayaks, motos de agua, cama elástica, tobogán, esquí acuático y equipo de buceo.

Parece Ortega además ha pensado en compartir con su familia la embarcación. Al fin y al cabo, está dividido en zonas para adultos como jacuzzi o solárium, pero a la vez dispone de un parque infantil donde poder jugar con sus nietos.

Fue el pasado mes de marzo cuando se supo que el empresario vendía Drizzle, el yate de 68 metros de eslora y 76 millones de euros con el que navegaba por el Atlántico y el Mediterráneo. Ahora, después de varios meses de construcción, parece que su nuevo superyate está listo para surcar los mares.