
Saul Craviotto
Saúl Craviotto fuera de la piragua: su historia de amor y sus otros logros
Ya es leyenda al convertirse en el deportista español con más medallas olímpicas de la historia
El éxito nunca se le ha subido a la cabeza. Una persona sencilla, cuya vida equilibra su pasión por el piragüismo, su vocación como policía, su amor por la cocina y su papel como esposo y padre. Saúl Craviotto ha consolidado su nombre como uno de los más destacados deportistas en la historia de España, y su legado en el piragüismo es incomparable.
Durante los Juegos Olímpicos de París 2024, Craviotto firma un nuevo hito al ganar su sexta medalla olímpica, un bronce en la categoría K4 500, reafirmando su posición como el piragüista español más laureado en la historia de los Juegos Olímpicos. Pero su carrera en el piragüismo comenzó a destacar en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, donde ganó su primera medalla de oro en la modalidad K2 500. Desde entonces, ha mantenido una trayectoria impresionante: una medalla de plata en Londres 2012 (K1 200), un oro y un bronce en Río 2016 (K2 200 y K1 200, respectivamente), y una plata en Tokio 2020 (K4 500). Su última conquista en París 2024 añade un bronce a su impresionante colección de medallas olímpicas.

El K4 500 con Craviotto
Nacido en Lérida el 3 de noviembre de 1984, Saúl creció en un ambiente en el que el piragüismo formaba parte del día a día, influenciado por su padre, Manuel Craviotto, un destacado piragüista que fue campeón de España en varias ocasiones. Desde pequeño, Saúl mostró interés y dedicación por este deporte, lo que lo llevó a ingresar en un centro de alto rendimiento, donde perfeccionó sus habilidades. Paralelamente a su formación deportiva, decidió forjarse un futuro en otra carrera. Consciente de que el piragüismo no tenía el impacto mediático de otros deportes, como el fútbol, decidió ingresar en el Cuerpo Nacional de Policía, donde se licenció y comenzó a trabajar patrullando las calles de Gijón en 2017. Durante la pandemia de 2020, retomó su puesto como policía, demostrando su compromiso tanto con el deporte como con la seguridad ciudadana.
Pasión por la cocina
Saúl Craviotto, objeto del deseo en 'MasterChef'
Además de sus logros en el deporte y su carrera en la policía, Craviotto ha desarrollado una profunda pasión por la cocina, una afición que se intensificó tras su participación en 'MasterChef Celebrity'. En 2017, sorprendió a todos al ganar la edición del popular programa de cocina, mostrando su habilidad en los fogones.
La cocina se ha convertido en un espacio donde Saúl puede expresarse de una manera diferente. Su interés por la gastronomía también está influenciado por su esposa, Celia García, quien es Técnico en Nutrición y Dietética. Celia ha sido una fuente de inspiración para Craviotto, ya que ambos comparten el gusto por la comida saludable y el bienestar. En sus redes sociales, donde tiene más de 383.000 seguidores en Instagram, Saúl comparte regularmente recetas, trucos de cocina y su vida en familia, integrando su pasión por la piragua con la cocina.
Padre de tres hijas
La vida de Craviotto no se limita solo a sus logros en el deporte. En 2012, tras obtener la medalla de plata en Londres, decidió dar un paso importante en su vida personal al pedirle matrimonio a Celia García. La pareja se casó en 2013 en una emotiva ceremonia religiosa en la iglesia de San Pedro. Juntos, han formado una familia numerosa con tres hijas: Valentina, Alejandra y Olivia, con quienes viven en una casa unifamiliar en Gijón.