Pilar Torres, de interpretar a Bea en 'Verano Azul' a trabajar en un hospital militar

¿Quién no ha tarareado alguna vez la melodía pegajosa de Verano Azul? La serie, que nos acompañó con su música y sus entrañables personajes, regresa cada verano para recordarnos los buenos tiempos en la playa de Nerja y las aventuras de su icónica pandilla. Esta serie, que capturó el corazón de toda una generación desde su estreno en 1981, sigue siendo un clásico que no pasa de moda.

Entre los personajes que dejaron huella en los espectadores, destacan Bea y Desi, interpretadas por las hermanas Pilar y Cristina Torres. La historia de cómo estas dos jóvenes consiguieron sus papeles es casi tan fascinante como las aventuras de sus personajes en la serie.

Cristina Torres, de 16 años en ese entonces y ya con algo de experiencia actoral, se presentó al casting para el papel de Desi. Su hermana mayor, Pilar, acompañaba a Cristina aunque no tenía intención de participar en la selección. Sin embargo, la presencia de Pilar no pasó desapercibida para el director Antonio Mercero, quien decidió que Pilar podría encajar perfectamente en el papel de Bea, que aún estaba vacante. Así, las dos hermanas se unieron al elenco, aportando su magia a los personajes femeninos: Bea, la chica guapa por la que Javi (Juanjo Artero) y Pancho (José Luis Fernández) se disputaban, y Desi, la amiga más divertida y carismática del grupo, con sus gafas y aparato que, lejos de ser el estereotipo convencional, aportaba una perspectiva única y valiosa.

Emparentada con Rocío Dúrcal

Con el paso de los años, Pilar y Cristina Torres han llevado vidas bastante alejadas del foco mediático. Pilar, ahora de 62 años, ha optado por una carrera distinta y trabaja como auxiliar de enfermería en el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla en Madrid, donde también trabaja su hermana. Su vida personal ha sido una montaña rusa: se enamoró del cámara Carlos de las Heras, hermano de Rocío Dúrcal, con quien tuvo a su hijo Adrián. Tras esa relación, Pilar encontró otra pareja, con quien tuvo a su segundo hijo, Manuel. A lo largo de su vida, Pilar ha vivido diversos cambios y desafíos, incluyendo una separación. Aunque participó en eventos con motivo del treinta aniversario de Verano Azul, ha mantenido una vida privada discreta y no se la ve frecuentemente en el ojo público.

Cristina, de 61, por su parte, ha tenido una trayectoria más visible en el mundo del espectáculo. Aparte de su papel en Verano Azul, Cristina ha trabajado en otras producciones como Fortunata y Jacinta. Se casó, tuvo una hija y, tras una separación, volvió a casarse. Aunque ahora también trabaja como auxiliar de enfermería, mantiene una conexión continua con la serie a través de eventos y homenajes.

Así, mientras Verano Azul continúa siendo una parte entrañable de nuestras memorias veraniegas, las vidas de Pilar y Cristina Torres demuestran que, aunque la fama puede ser efímera, el impacto de la serie y su legado permanecen. Cada verano, al escuchar la melodía que nos transporta a Nerja, es imposible no pensar en las historias y los personajes que hicieron de Verano Azul un fenómeno atemporal.