Sánchez y Begoña Gómez se relajan en un hotel de lujo de Andorra en plena crisis migratoria

Broche de oro para un verano olímpico. Pedro Sánchez y Begoña Gómez se encuentran en el mejor hotel de Andorra disfrutando de unos días de relax y de competiciones del campeonato del mundo de BTT —bicicletas todoterreno— que se celebra en Arinsal, deporte del que, supuestamente, Sánchez es un gran aficionado. Para su estancia privada en el principado, la familia ha elegido el mejor cinco estrellas gran lujo de Andorra, el Sport Hotel Hermitage. Establecimiento de referencia en el Pirineo, el hotel se encuentra en la localidad de Soldeu, y aunque es especialmente cotizado en temporada de esquí dado que se ubica al pie de uno de los remontes principales de la estación de Granvalira, la estación pirenaica de mayor tamaño, su emplazamiento en plena montaña también es atractivo para los amantes de la naturaleza y el creciente número de personas que eligen la montaña para pasar el verano.

Inspirado en las típicas construcciones alpinas de madera, el Hermitage lo tiene todo para ser un refugio perfecto y no defraudar a los sibaritas que acuden a la montaña ni en verano ni en invierno. Situado a una altitud de 1.800 metros, y rodeado de valles y montañas, sin que se vea ninguna otra construcción, tan solo la nieve o el verdor de la hierba, en su interior hay todo lo que un viajero de gustos refinados puede desear. Su amplio spa pasa por ser el mejor de Andorra, tiene un restaurante gastronómico con una estrella Michelin, el buen gusto impera en sus zonas comunes y en habitaciones y suites, unas 130 en total, y la excelencia de su servicio queda acreditada por el hecho de ser el único hotel del país miembro de la prestigiosa organización The Leading Hotels of the World, sello de calidad de la mejor hospitalidad internacional.

Inaugurado en 2006, el hotel es fruto del proyecto personal del empresario andorrano Josep Calbó, experto esquiador, buen conocedor de Soldeu y amante de los detalles que gustar complacer a sus clientes. «Los hoteles de esquí hay que pensarlos para que estén a gusto los miembros de las familias que no esquían». Esa es su filosofía. Aunque sus precios en esta época del año son considerablemente más bajos, y rondan los 400 euros por noche, muchas de sus suites sobrepasan fácilmente los 2.500 euros en temporada alta.

Si Pedro Sánchez y Begoña Gómez vuelven con hambre de las competiciones de BTT, tienen varias opciones dentro del hotel donde elegir. La más refinada, sin duda, su restaurante gastronómico, dirigido por el chef español Francis Paniego, y premiado con una estrella Michelin. Su cocina se basa en dos menús degustación diferentes: Memory, que combina recetas contemporáneas con sus platos más exitosos de distintas estaciones; y Un Paseo por Andorra, que muestra la cocina andorrana y sus sabores a través de ingredientes como la carne de caballo, la trucha, los embutidos típicos de la zona como la «girella» y la «donja», y el «trinxat», un plato elaborado con patatas, col y tocino. Por lo que respecta al Spa, el área dedicada al bienestar cuenta con una superficie de nada menos que 5.000 metros cuadrados, un amplio circuito de aguas y numerosas salas de diferentes tratamientos.

Si el presidente y su familia quisiera más privacidad, hay un ala del resort, inaugurada posteriormente, dedicada a residencias privadas, pero con todos los servicios del hotel. Las residencias son muy populares en periodos de vacaciones escolares en temporada de nieve y entre sus clientes habituales se encuentran varios deportistas del Barça. Las residencias tienen todos los detalles que uno pueda imaginar, un interiorismo realmente exquisito, al igual que el hotel, y naturalmente, unos precios en consonancia con la alta demanda y la escasez de un producto de esta calidad, lo que fácilmente hace que pueden superar los 2.500 euros la noche.

Pero la verdadera joya de la corona del pequeño y pujante imperio hotelero de la familia Calbó es la borda que lleva su nombre y que fue inaugurada hace dos años. Se trata del sueño hecho realidad de todo esquiador y amante de la montaña que busque privacidad, confort y excelente buen gusto y servicio impecable y cálido a pie de pista. Propiedad de la familia desde hace siglos, tras largos años de rehabilitación y reforma, la antigua casa refugio para animales, se transformó en uno de los mejores alojamientos de alquiler de alta montaña de Europa. 400m2 en la cota 1850 sin nada que envidiar a los mejores chalets alpinos de exclusivas estaciones de Suiza, se alquila íntegramente por semanas y ofrece todos los servicios, desde chef privado a mayordomo. ¿Su precio? 40.000 euros la semana.

Sánchez y el lujo

Con la elección de su destino veraniego, Pedro Sánchez confirma que no le hace ascos precisamente a los establecimientos de lujo en sus viajes fuera de España. Aunque en su día no trascendió a la opinión pública, en una de sus visitas a Nueva York con su mujer, siendo ya presidente del Gobierno, la pareja se alojó en el lujosísimo The Mark, en la zona más cara y exclusiva de Manhattan. Se trata del hotel referencia en la gala del Met y de los multimillonarios del Upper East Side cuyas habitaciones no bajan de los 1.500 euros por noche. Sin duda, una elección cuando menos sorprendente.