La sanción que ha tenido que enfrentar Bárbara Rey
La vedette reapareció en el Teatro Victoria de Hellín, Albacete, con su espectáculo La Noche Bárbara
En medio de la tormenta, la vedette Bárbara Rey reapareció en el Teatro Victoria de Hellín, Albacete, con su espectáculo La Noche Bárbara, creado por Sandra Bruman. Gracias a la dirección artística de Bruman, el evento agotó las entradas, que se vendieron a un precio de 17 euros. En esta noche tan especial, Bárbara no estuvo sola. Compartió escenario con la drag queen Gina Boss, el mago Lumaky y la cantante Blanca Villa, quienes también brillaron durante el espectáculo. No obstante, esta reaparición llegó en un momento clave para Bárbara Rey, justo cuando unas fotos de los años 90, reveladas recientemente por su hijo Ángel Cristo, salieron nuevamente a la luz. En dichas imágenes, se la ve besándose con el Rey Juan Carlos, lo que ha vuelto a despertar el interés y la polémica en torno a este romance.
Días antes de su actuación, la artista confesó estar con el «corazón roto». Sin embargo, sobre el escenario, demostró su gran profesionalismo, dejando de lado cualquier controversia y entregándose por completo al espectáculo. Con un minivestido de lentejuelas rosas que dejaba ver sus espectaculares piernas, Bárbara Rey conquistó al público manchego, agradeciendo la oportunidad de volver a los escenarios después de tanto tiempo. «Estoy feliz y contenta», dijo emocionada, explicando que había aceptado la propuesta porque, tras momentos difíciles, sentía que debía regresar para agradecer al público que siempre la ha seguido.
Sin embargo, las cosas no tardaron en torcerse. Se encontró con una desagradable sorpresa: una multa de 80 euros por estacionar en zona azul. La sanción, parece haber sido la guinda amarga de una noche ya cargada de tensión porque como la expectación mediática alrededor de la vedette fue intensa, la situación se volvió aún más incómoda cuando el equipo de seguridad de la cantante, aparentemente molesto por la presión de los medios, trató mal a algunos periodistas presentes, generando otra fuente de polémica. La tensión aumentó cuando, al entrar en un restaurante local para celebrar su éxito, su equipo cerró la verja del local de manera brusca, lo que no sentó bien a los curiosos ni a la prensa, según recoge Diez Minutos.
Por si fuera poco, a la mañana siguiente, una ambulancia acudió al hotel donde la de Totana se hospedaba. ¿La razón? Su compañera en el escenario, Blanca Villa, había pasado mala noche debido a problemas estomacales. «No he podido dormir, estoy con mucha fatiga y retortijones», comentó Blanca a los medios, quienes aprovecharon la oportunidad para intentar obtener declaraciones de Bárbara, aunque la vedette se encontraba «durmiendo y roncando divinamente», según su compañera.
A pesar de las dificultades, la ex de Ángel Cristo sigue en pie, demostrando que nada la detiene. Entre la polémica de su pasado con el Rey Juan Carlos, las críticas por la actitud de su equipo y los pequeños contratiempos como la multa de tráfico, la vedette se mantiene como la absoluta protagonista de la escena mediática. No cabe duda de que, para Bárbara, el espectáculo debe continuar, aunque el drama, a veces, la siga fuera del escenario.