El barrio burgués de la Infanta Cristina en Ginebra

La Infanta Cristina ha comprado una casa en Barcelona, pero continúa viviendo en Ginebra. A pesar de que sus cuatro hijos ya viven fuera de su casa y de que ella pasa cada vez más tiempo en España, la hija pequeña de Juan Carlos I es feliz en la ciudad suiza, donde cuenta con mucha más privacidad que en España, además de sentirla como su hogar, ya que lleva allí desde 2013.

En sus primeros años en la ciudad, la infanta vivió junto a Iñaki Urdangarin y sus hijos en el centro histórico. Pero actualmente reside en uno de los barrios burgueses más prestigiosos de la ciudad. Champel, que así se llama la zona, es un distrito cuyo urbanismo se caracteriza por sus amplísimas avenidas y zonas verdes.

Sus hijos

El colegio Internationale, en el que cursaron sus estudios sus hijos junto a numerosos hijos de diplomáticos, es uno de los lugares clave del barrio. Según publicó ¡HOLA!, doña Cristina encontró esta casa «en un momento muy difícil, tras ser privado su exmarido de la libertad y, según cuenta a sus amigos, es perfecto de tamaño para una familia de cinco. Tiene mucha luz, jardín, servicio de seguridad y es una zona residencial que está cerca de todo». A diez minutos en coche del aeropuerto, los alquileres no bajan de los 4.000 euros al mes por un piso, superando los 10.000 en el caso de las residencias con jardín. También en Champel está el conocido Parque Bertrand, famoso por el jardín blanco que alberga en su interior, y llamado así por estar compuesto únicamente de flores del mencionado color.

Buena zona

Comercios, restaurantes, oficinas, tiendas e incluso un área de centros médicos también se encuentran ubicados en el barrio de la infanta, cubriendo así las necesidades que tanto ella como el resto de vecinos de la zona puedan tener, sin la necesidad de desplazarse al centro de la ciudad. Un trayecto que en breve podrá ser cubierto de una manera cómoda y sencilla gracias a una línea ferroviaria que unirá el centro de Ginebra con la ciudad de Annemasse (en Francia) y que pasa por la zona.

A pesar de que hoy en día Champel es un barrio burgués, que reúne a familias adineradas y está catalogado como zona chic por guías turísticas, la historia del lugar no siempre fue así. Desde la Edad Media y hasta el siglo XVIII, esta era una zona en la que se llevaban a cabo ejecuciones, y que durante un tiempo fue considerado como un barrio maldito de la ciudad de Ginebra.

Maldiciones aparte, doña Cristina ha encontrado en el país alpino una estabilidad a la que no parece tener intención de renunciar. Allí tiene su trabajo en la Fundación Aga Khan, un entorno que la arropa y una rutina en la que, según reveló a la revista ¡HOLA! una fuente cercana a la infanta, se incluye desempeñar algunas de las conocidas como tareas del hogar, ya que «no cuenta con mucha ayuda en casa».