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La Princesa Nora en el Rastrillo Nuevo Futuro este juevesJ.I.Viseras

Gente

Nora de Liechtenstein, la discreta princesa que vive desde hace cuatro décadas en España

Saltó a la fama por ser la mujer del Marqués de Mariño, el padre de Isabel Sartorius, pese a su discreción

Nora de Liechtenstein es princesa -desde la cuna- del pequeño principado de Liechtenstein y recibe el tratamiento de Alteza Serenísima. Nació en Zúrich el 31 de octubre de 1950. Es la única hija del fallecido Príncipe Francisco José II de Liechtenstein. Y la hermana del soberano actual.

Creció en un castillo rodeada de montañas y valles verdes y pertenece a una de las familias reales más ricas de Europa. Es, desde 2002, viuda del marqués de Mariño. Apasionada del deporte y miembro del COI, por la llamada en su día del presidente José Antonio Samaranch. Esquía y bucea.

La boda

Nora, Norberta Isabel, se casó en la iglesia parroquial de San Florián, en Vaduz, con el padre de Isabel Sartorius, -IV marqués de Mariño, Vicente Sartorius y Cabeza de Vaca-, en un enlace fechado en junio de 1988. Boda que se celebró un año después de conocerse a través de amigos comunes.

Isabel Sartorius en Vaduz el 10/06/1988©GTRESONLINE

De esta unión nació su hija Teresa Sartorius y de Liechtenstein en 1992 en Madrid, donde creció y quien se instaló en Nueva York por razones profesionales durante una temporada antes de volver a España en la pandemia. Residiendo a veces con su madre en un bonito piso de la zona de Almagro en Madrid, donde es habitual ver a Nora paseando con su hija o acudiendo a misa a San Fermín de los Navarros.

Nora de Liechtenstein y su hijaJesusBriones

Su hija

Teresa Sartorius, la única hija de Nora, estudió Cordon Bleu, en la escuela de cocina de Madrid, y un curso de health coach. En la actualidad dirige el Wellness Weekends, en la finca familiar. Con sus 256 hectáreas, es el lugar perfecto para reunirse con amigos y trabajar para construir vidas saludables.

La Infanta Elena de Borbón saludando a Nora este jueves en Madrid en El RastrilloJ.I.Viseras

La finca

La Princesa Nora reside también en ocasiones en su finca «Vivencia Dehesa» de Valdepajares de Tajo, en Peraleda de la Mata (Cáceres), una propiedad que compró con su esposo en 1988. Una finca preciosa que linda con la sierra de Guadalupe y la sierra de Gredos.

Su presencia en la vida pública es escasa, la suya es una vida «normal» según ella misma dice. Le gusta muy poco la prensa. Pero, inevitablemente, sufrió una época como absoluta protagonista de los medios de comunicación. Su marido era el padre de la primera novia del Príncipe Felipe. Y las cámaras entonces estaban siempre alrededor de toda la familia Sartorius.

Isabel Sartorius

Vicente Sartorius era divorciado de Isabel Zorraquín, madre de sus hijos mayores, Isabel, Cecilia y Luis cuando se casó con la Princesa Nora que estaba soltera. Sus vidas se volvieron transparentes para la opinión pública a raíz del romance de la primogénita del marqués de Mariño con el heredero de la corona.

Isabel Sartorius saltó a la fama cuando la fotografiaron en 1989 una lancha en aguas de la isla de Cabrera con el entonces Príncipe de Asturias, el ahora Rey Felipe VI.

Su noviazgo supuso un auténtico revuelo en España y sacó del anonimato a ambas familias. Durante cuatro años estuvieron juntos, más o menos. Cuatro años en los que Nora hizo lo posible y lo imposible por proteger a la hija de su marido.

Solidaria

Es una persona a quien le gusta ayudar a los demás. Su labor solidaria es tan potente como silenciosa.En una entrevista en Youtube con motivo del 50 aniversario del ICER de Costa Rica, Nora de Liechtenstein reconoce que viajó a Costa Rica en más de 10 ocasiones para apoyar a los necesitados facilitándoles el acceso a la educación.

En esta interesante y reciente entrevista, la hermana del actual soberano del pequeño país, explica cómo su tierra natal pasó de ser pobre a ser rica, en lo que es un canto a la esperanza. «Un país de 160 kilómetros cuadrados entre Suiza y Austria, que era pobre y que después de la II Guerra Mundial subió mucho. Es ahora uno de los más industrializados del mundo. No hay ni 40 mil habitantes. Es muy bonito. En los años 20 y 30 empezaron mis antepasados una legislación favorable para que la gente pudiera trabajar mejor. Somos a día de hoy de los países de renta per cápita más alta del mundo», reconoce en la entrevista. La Princesa estos días colabora y ayuda de nuevo en el Rastrillo solidario de Nuevo Futuro en Madrid.