Qué le ha pasado a Lucas, del dúo Andy y Lucas, en la nariz

La reciente aparición de Lucas González, miembro del popular dúo musical Andy y Lucas, ha dejado más preguntas que respuestas. Durante la presentación del evento LifeStyle On TV, no fue su talento ni su carisma lo que captó la atención, sino algo mucho más visible: su nariz. En redes sociales y tertulias televisivas no se habla de otra cosa, y la pregunta que domina la conversación es clara: «¿Qué le ha pasado a la nariz de Lucas?»

Las imágenes actuales del cantante, comparadas con las de hace unos años, han desatado una avalancha de especulaciones. ¿Una rinoplastia malograda? ¿Efectos de algún tratamiento estético fallido? ¿O quizá algún problema de salud? Aunque Lucas ha sido tajante en sus declaraciones, negando cualquier intervención quirúrgica, la polémica está servida. Hace unos meses, Lucas ya salió al paso de las críticas con su característico desparpajo. En una publicación en redes sociales, aseguró: «Esta nariz que tengo es de mi padre, picha. Será genética. Yo no me he hecho nada de nada». Según el cantante, su cambio físico se debe a una combinación de pérdida de peso, envejecimiento y algunos cuidados básicos como masajes faciales y el uso de cremas. Aunque admitió haberse puesto «algún pinchacito de bótox», defendió que su nariz sigue siendo completamente natural.

Pero las redes no perdonan, y la periodista Marisa Martín Blázquez, en el programa TardeAR, lanzó una teoría que ha alimentado más la controversia. Según ella, Lucas podría estar sufriendo una condición conocida como «nariz en silla de montar» por una «complicación de una posible rinoplastia». Esta deformidad, que implica el colapso del cartílago nasal, puede ser consecuencia de una rinoplastia previa, traumatismos o incluso enfermedades. La condición hace que el puente nasal se hunda, dando lugar a una apariencia cóncava que es evidente en las imágenes recientes del cantante.

Al analizar las fotos de Lucas de 2016 y 2024, las diferencias son innegables. En las imágenes más antiguas, su nariz presentaba un puente elevado y recto, con una estructura que le daba un aspecto proporcional y definido. En cambio, las fotos actuales muestran un puente nasal más bajo y una ligera concavidad en la parte media, rasgos característicos con la «nariz en silla de montar» que cuenta Marisa. Además, la punta de su nariz ahora parece menos proyectada y más redondeada, lo que refuerza la hipótesis de un cambio estructural en el cartílago nasal. Si realmente se trata de una deformidad como la que se especula, el tratamiento más común es una cirugía reconstructiva. Este procedimiento puede implicar el uso de injertos de cartílago, a menudo tomados de otras partes del cuerpo como las costillas o las orejas, para restaurar el soporte y la forma de la nariz. Aunque estas intervenciones suelen ser complejas y personalizadas, pueden devolverle a la nariz una apariencia más natural y funcional.

Esta situación pone de manifiesto el escrutinio constante al que están sometidos los famosos y cómo los estándares de belleza pueden convertirse en una carga. Aunque Lucas insiste en que su nariz es producto de la genética y el paso del tiempo, las especulaciones no cesan. Mientras tanto, el cantante sigue adelante con su carrera y con la gira de despedida de ‘Andy y Lucas’ programada para 2025, demostrando que, nariz o no, su música sigue siendo lo que realmente importa.