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Rafa Nadal no dudó en inmortalizarse con el resto de comensalesInstagram

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Qué comió y dónde Rafa Nadal en su última visita a País Vasco

El tenista pasó el fin de semana junto a su pandilla de amigos, con los que disfrutó de la gastronomía vasca en dos de los mejores establecimientos

Han pasado apenas dos semanas desde que Rafa Nadal se despidiese de forma definitiva de las pistas de tenis. El deportista, ahora jubilado, como él mismo se definió, está centrado en sus otros compromisos empresariales que van desde la creación de hoteles en la Costa Brava a la gestión de su Fundación y Academia, ambas con su nombre.

Pese a que su agenda está completa, no lo está al mismo nivel que cuando competía y ahora sí puede disfrutar de tiempo libre. Una de sus primeras escapadas lejos de Mallorca, donde vive con su mujer y su hijo, ha sido a Bilbao, a donde llegó en vuelo directo el pasado viernes junto a ellos y a varios de sus amigos más cercanos.

Un total de 17 personas acompañaron a la leyenda del tenis por su periplo vasco, donde no faltó una degustación gastronómica a la altura de la comunidad autónoma. Nadal se dejó ver con su séquito en la zona de tapeo por excelencia de la localidad, la plaza Campuzano, donde se encuentra uno de los bares más conocidos: el Satai.

Tal y como avanza El Correo, que se puso en contacto con Ander, el dueño del establecimiento, varios de los amigos de Nadal visitan la ciudad por motivos laborales y, ahora que tiene tiempo, ha querido acompañarles. En sus viajes por trabajo nunca falta una visita a este mítico bar, de ahí que mantenga una estrecha relación con ellos. «Vienen mucho, todos los años se llevan lotería de Navidad», explica al periódico vasco. Además reconoce que llevaban años diciendo que iban a conseguir que el tenista les acompañase y por fin el pasado viernes pudieron hacerlo realidad.

En su comanda, no faltaron las gildas, que hicieron famoso al local cuando lo abrieron. «Los amigos le decían todo el tiempo que son las mejores de Bilbao», explicó a El Correo. Tampoco faltaron los kendall, un cóctel a base de ginebra, zumo de naranja natural y tónica naranja que debe su nombre a Howard Kendall, el entrenador del Athletic que lo hizo famoso por pedirlo en cada establecimiento bilbaíno que visitaba.

Las famosas gildas de Bilbao

La visita a la ciudad bilbaína dio para mucho porque también probaron Asador Etxebarri. Situado en la localidad vasca de Atxondo (Vizcaya) se alzó el pasado mes de junio como el segundo mejor restaurante del mundo después de Disfrutar, en Barcelona. Bittor Arginzoniz es el maestro en la cocina que, con un menú degustación de 280 euros por persona y 14 platos, domina el arte del mar y montaña. Se comienza con una selección de chorizo de la casa, anchoas en salazón, queso fresco de búfala, tomate y calabacín con setas. A continuación se disfruta de las gambas de Palamós, longuerón, chipirón en su tinta, kokotxa de merluza rebozada, hongos de berenjena, lubina y chuleta de vaca, uno de los platos estrella.