La intensa agenda social del Padre Ángel

El Padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz, ha construido una imagen que combina la filantropía con una constante presencia en el foco mediático. Su participación en eventos de alto perfil y su cercanía a figuras políticas y públicas lo han convertido en un personaje recurrente en titulares y fotografías.

Sin embargo, este protagonismo no está exento de polémica, ya que muchos cuestionan si su intensa agenda puede comprometer su labor humanitaria y su neutralidad como sacerdote. Uno de los episodios recientes que más controversia ha generado fue su asistencia al Congreso Federal del PSOE, donde ocupó un lugar destacado, sentado en la segunda fila detrás del presidente Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Gómez. Esta última, imputada por corrupción y tráfico de influencias, fue ensalzada durante el evento, algo que no pasó desapercibido para los críticos del sacerdote. La presencia del Padre Ángel fue interpretada por algunos como un intento de legitimar la imagen de Gómez y del partido en un momento políticamente delicado. Las reacciones no tardaron en llegar pues, como algunos fieles recordaban, el PSOE es un partido proaborto que legisla a favor de la eutanasia y la ideología género.

Pero la polémica no se limita a su cercanía con el PSOE. En 2023, Alberto Núñez Feijóo, líder de la oposición y presidente del PP, visitó la parroquia de San Antón para reconocer el trabajo del Padre Ángel en la lucha contra la exclusión social. En ese encuentro, ambos posaron para las cámaras, reforzando la percepción de que el sacerdote sabe cómo moverse en distintos espectros políticos para mantener su visibilidad. Esta habilidad para estar presente tanto en la izquierda como en la derecha alimenta el debate sobre su verdadero propósito: ¿se trata de construir puentes o simplemente de asegurar su protagonismo?

Además, su álbum de fotografías con figuras destacadas no se limita al ámbito político. El cantante Raphael, junto a su esposa Natalia Figueroa, también posó con el sacerdote como padrino de un proyecto humanitario en Roma. Estas colaboraciones reflejan su poder de convocatoria y capacidad para rodearse de personalidades influyentes.

Aunque su labor humanitaria es innegable, su constante protagonismo genera dudas sobre sus prioridades. Para algunos, su figura se ha convertido en un símbolo de dedicación social; pero otros consideran que su gusto por el foco mediático desvirtúa su labor.

Una de las historias más controvertidas en torno al Padre Ángel se remonta al año 2020, cuando envió una carta a Pablo Iglesias, entonces vicepresidente segundo del Gobierno, agradeciéndole su labor durante la pandemia. En la misiva, el sacerdote destacó el trabajo de Iglesias en la lucha por un «mundo mejor» y le reconoció su compromiso con los sectores más vulnerables.

Aunque el gesto fue presentado como una muestra de gratitud, no tardó en ser interpretado como un posicionamiento político que desató críticas desde sectores conservadores, que vieron en la carta un respaldo explícito a un líder que representa ideas completamente alejadas de los valores cristianos. El sacerdote fue más allá, proponiendo a Pablo Iglesias y Pedro Sánchez como candidatos al Premio Princesa de Asturias por su gestión durante la pandemia, lo que intensificó aún más el debate. Este episodio reflejó no solo su cercanía a figuras de la izquierda política, sino también su habilidad para mantener su relevancia mediática, incluso en situaciones polémicas.

Aunque su labor humanitaria sigue siendo reconocida, la constante exposición del Padre Ángel y sus vínculos con personalidades de todos los ámbitos han generado una inevitable controversia. Su paso por el Congreso Federal del PSOE, sus fotos con Feijóo y su estrecha relación con Pablo Iglesias son solo capítulos de una trayectoria tan mediática como controvertida.