El día en que el gemelo de García-Page dio un portazo al PSOE, desencantado con Sánchez

La expectación por la entrevista de Emiliano García-Page en El Hormiguero crece cada minuto. Se trata de la primera vez que el presidente de Castilla La Mancha visita el espacio de Pablo Motos. Conocido por ser una «piedra en el zapato» de Pedro Sánchez, ha sido un crítico firme de los acuerdos con EH Bildu y los indultos a los condenados del procés, entre otras cosas. Entre sus anécdotas, destaca una divertida: en un evento, Sánchez confundió a su hermano gemelo, Javier García-Page, con Emiliano, saludándolo con un «¿Qué tal, Emi?». La confusión no fue casualidad, ya que son gemelos.

Javier, el hermano gemelo de Emiliano, decidió en el 2023 salir del Partido Socialista debido a que sus «principios y valores socialistas» ya no coincidían con la dirección del partido. En una carta explicó que su baja era «inmediata y sin posibilidad de cambio», pero aseguró que seguiría siendo socialista. Desde entonces, se dice que Javier se dedica a las relaciones públicas de empresas.

Javier y Emiliano García-Page nacieron el 11 de junio de 1968 en una casa humilde del centro de Toledo, concretamente en un bajo, siendo los dos gemelos más pequeños de cinco hermanos. Su madre, ama de casa, había decidido que no quería más hijos después de tener al primero, pero el cura que atendió su petición le dijo que eso quedaba en manos de Dios. Su padre era un modesto encuadernador de libros.

Desde pequeños, Javier y Emiliano han sido tan iguales que no solo comparten el ADN, sino también muchas experiencias. Ambos estudiaron Derecho y se licenciaron el mismo año. Tienen dos hijos cada uno, pero aunque son casi idénticos, sus caminos políticos fueron muy diferentes. Javier, pese a ser miembro del PSOE, nunca se metió tan de lleno en política, a diferencia de Emiliano, quien con 19 años ya era concejal del PSOE en el Ayuntamiento.

Los hermanos García-Page crecieron en un ambiente bastante humilde, pero siempre con buenos recuerdos. Emiliano recuerda que pasaban los veranos en la playa de Cullera, y se ríe al contar que la primera vez que fueron a la playa fue cuando tenía 15 años. «Estaba tan acostumbrado a vivir a ras de suelo, en un bajo, que los pisos altos me parecían de otro planeta», dice entre risas. Además, bromea con que su hermano siempre fue más ligón. Y, con humor, Emiliano dijo una vez: «Gracias a él, nunca me sentí solo». De Emiliano se sabe que está divorciado de Yolanda Fernández desde el 2020.

Emiliano siempre escucha los consejos de su hermano. «Lo que sí hago es escucharle. Compartimos muchas convicciones políticas, pero él prefiere mantenerse donde está. Es muy común que yo le explique determinadas situaciones, y él me hace ver puntos de vista que me ayudan», agregó.

A Emiliano se le dio mejor la política, mientras que Javier destacó en el deporte, especialmente en el fútbol, como él mismo contó: «Si jugábamos a fútbol, él era el futbolista y yo, el árbitro». Aunque sus personalidades son diferentes, la conexión entre ambos es indiscutible. Ambos siguen viviendo en Toledo y, no es raro que se reúnan para compartir una comida.