
Miguel Ángel Revilla, junto a Antonio Resines y Paz Padilla
Revilla, disfrazado de juez y en medio del rodaje de una película: así recibió la demanda del Rey Juan Carlos
Su amigo Resines le invitó a hacer un cameo en una comedia familiar que se está rodando en Vitoria
expresidente de Cantabria, economista, escritor y charlatán sin filtros. Miguel Ángel Revilla suma una nueva faceta como actor. El político interpreta el papel de juez para casar a Paz Padilla, con Antonio Resines como testigo, en la comedia Cuerpos Locos. El rodaje, que tiene lugar en diversos escenarios, incluyendo el Palacio Foral de Bilbao, fue el escenario donde se entero de que el Rey Juan Carlos le había demandado por «expresiones injuriosas y difamantes». Solicita una indemnización de 50.000 euros por daños morales, cantidad que el propio monarca ha anunciado que será donada a Cáritas.
Este enfrentamiento legal se originó a partir de los comentarios que el cántabro hizo en varias entrevistas, donde expresó su firme rechazo hacia la corrupción. En su aparición en El Hormiguero en mayo de 2022, dejó claro su postura: «Yo estoy contra los corruptos. Yo no he robado en mi vida, ni en pensamiento, y no he sido defraudador porque pago hasta el último céntimo. Y quiero que quien me ha representado y me representa, dé ejemplo, pero al máximo nivel. Por eso estoy contra él».
La encargada de transmitirle la noticia fue su esposa, Aurora Díaz Abella, quien, durante el rodaje, hizo una señal a su marido para que abandonara el set. A pesar de mantener siempre un perfil bajo, su papel como mensajera de esta noticia importante no pasó desapercibido. En una entrevista con Y Ahora Sonsoles, Aurora compartió: «A casa no nos ha llegado, nos hemos enterado por la gente que ha empezado a llamar». Según fuentes cercanas, la Casa Real no estaba al tanto de la demanda, que fue descrita como una «iniciativa personal».
La enfermedad de su mujer
A pesar del revuelo, el matrimonio sigue llevando una vida tranquila en Astillero, un pequeño municipio cerca de Santander. Se conocieron hace más de 20 años en la sede del PRC y han formado una familia unida. No todo ha sido fácil para Aurora, ya que hace tres años fue diagnosticada con cáncer de colon y tuvo que someterse a un largo y doloroso tratamiento de quimioterapia. Miguel Ángel ha estado a su lado en todo momento, brindándole su apoyo incondicional. Este proceso ha fortalecido aún más su relación, con Revilla mostrando su profundo amor y admiración hacia su esposa: «Le han extirpado 35 centímetros de colon, pero es terrible que yo, con más de 80 años, que voy a cumplir en enero y con todas las patologías que he tenido, y ella, que no ha tenido ninguna enfermedad nunca, de repente le aparezca esto. Se ha cortado el pelo y ahora está incluso más guapa. Estoy más enamorado de ella que nunca porque ahora la necesito más», llegó a decir.
Miguel Ángel Revilla y su mujer
La pareja tiene una hija de 24 años, Lara, quien, al igual que su padre, está muy involucrada en la política y actualmente cursa Psicología. La joven comentó en una reciente entrevista que su padre siempre les ha educado en la libertad de opinar lo que quieran, añadiendo con humor: «No puede estar una hora sin hacer nada en la playa. Él es intenso». Además, tiene dos hijas más, Pilar y Jana, fruto de su matrimonio con María del Pilar Hoyo, con quien se casó en los años 70.
Por último, el político también disfruta de la dicha de ser abuelo. En 2014, recibió la feliz noticia de que sería abuelo por primera vez de Bruno, el hijo de su hija Pilar. Revilla ha compartido su alegría en sus redes sociales, mostrando su lado más tierno y alejado de la figura estricta que suele presentar en su faceta política.