Así es Thomas Flohr, el magnate suizo de los aviones en los que viaja el Rey Juan Carlos

El Rey Juan Carlos se trasladó a Abu Dabi en agosto de 2020 y ha fijado allí su residencia, pero viaja a Europa cuando su agenda se lo permite para cumplir con sus compromisos. Ginebra y Vigo son algunas de las ciudades que más visita. A Suiza acude para continuar con su seguimiento médico y a Galicia para disfrutar de las regatas, su deporte preferido.

Los traslados entre un lugar y otro no son un problema para él gracias a la intervención de Thomas Flohr, un empresario millonario que es dueño de una compañía de aviones privados llamada VistaJet. El inicio de este proyecto se remonta al año 2004 y con el paso del tiempo ha ido creciendo hasta consolidarse como una de las empresas más importantes del sector. Tanto es así que Forbes calcula que la fortuna de Flohr alcanza los 2.3 millones de dólares. Pero, ¿cómo ha llegado a este punto?

Thomas Flohr, de origen suizo, se dedica al mundo de los negocios y tiene que viajar mucho para poder completar su hoja de ruta. En un momento dado se dio cuenta de lo cómodo que sería que las personas que estén en las mismas condiciones que él pudieran disfrutar de un servicio privado y exclusivo. Fue así cuando se hizo con una serie de aviones y los empezó a alquilar. Ahora tiene más de 360 y entre su lista de clientes hay personas tan importantes como Don Juan Carlos.

«VistaJet está cambiando la experiencia de vuelo privado, con la gama más amplia de programas personalizados a bordo: desde una exquisita cena privada hasta el único sistema de entretenimiento para niños a bordo», explican en la página web del proyecto. Y añaden: «Nuestros socios pueden disfrutar de cada momento de su tiempo a bordo de nuestros aviones».

La idea es hacer una oferta personalizada. De esta forma, cada cliente tiene oportunidad de disfrutar de la experiencia al 100% porque está adaptada a sus gustos y necesidades. Uno de los lujos que merecen ser resaltados es que la empresa cuenta con una extensa red de colaboradores que se decían a buscar las mejores ofertas gastronómicas a bordo. De esta forma, disfrutan de menús diseñados por expertos, algunos con estrellas Michelin.

El lado personal de Thomas Flohr

Thomas Flohr se ha consolidado como un empresario relevante y sus relaciones personales le han ayudado a convertirse en un rostro influyente. Estuvo casado con Katharina Konecny, quien llegó a ser editora de moda y joyas en Vogue Grecia y Vogue Rusia. El matrimonio terminó separándose, pero siempre estarán unido porque juntos tuvieron a Nina Flohr. Esta última es la mujer de Felipe de Grecia y Dinamarca, hijo del fallecido Rey Constantino.

Flohr siente pasión por la velocidad. Es un piloto de carreras aficionados y ha decido patrocinar a la escudería de Ferraría de Fórmula 1 con VistaJet, una decisión muy acertada porque ha conseguido que la compañía tenga todavía más prestigio. El empresario tiene en cuenta la opinión de su hija Nina a la hora de dar ciertos pasos, de hecho esta última fue directora creativa del negocio hasta 2016 y mientras estaba en el cargo se cerraron grandes acuerdos. Por ejemplo, consiguió que la prestigiosa firma Moncler se encargara de vestir a la tripulación de sus aviones.