28 de junio de 1922: el expediente Picasso

El Expediente Picasso fue el informe redactado por el general Juan Picasso, destinado en el Consejo Supremo de Guerra y Marina (máximo órgano de la jurisdicción militar) en relación a los acontecimientos en la en Melilla en los meses de julio y agosto de 1921, conocidos como el Desastre de Annual.

El Debate comentaba que parecía que comenzaba a sentirse la eficacia de la labor del general Picasso pues de aquel expediente se habían desglosado «algunos casos para la instrucción sumaria» y que alguno de ellos iba tan adelantada que se podía afirmar que estaba «preso en el fuerte de Rostrogordo un comandante que debiendo encontrarse en Annual estaba en Melilla al día siguiente del desastre de julio».

Al año siguiente del desastre, el general Picasso presentó sus conclusiones al Consejo Supremo de Guerra y Marina en un resumen de 400 páginas. El gobierno presidido por José Sánchez Guerra decidió entonces llevar el documento al Congreso de los Diputados donde se firmó en julio de 1922 una primera Comisión de Responsabilidades. Más tarde se presentó el dictamen a las Cortes en noviembre de 1922 dando lugar a un apasionado debate llegando a convertirse en el problema político más importante del país.

Un año más tarde en el mes de julio se formó una segunda Comisión de Responsabilidades que no pudo emitir ningún dictamen porque se lo impidió el golpe de Estado de Primero de Rivera de septiembre de 1923. Este cerro las Cortes y cerró el Expediente.