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El Tres de Mayo por Francisco de Goya

'El Dos de Mayo', la primera gran película española sobre la Guerra de la Independencia

El filme fue un producto épico en el que Buchs destapó una voluntad populista, demostrando su facilidad para recrear ambientes históricos

Filme de 1927, dirigido por José Buchs, fue restaurado a partir de dos copias incompletas y de fragmentos recuperados por la Filmoteca Española y la Filmoteca Municipal de Zaragoza a comienzos del siglo XXI. El argumento de las escenas no conservadas fue suplido mediante textos e imágenes procedentes de la novelización que generó la película, lo que demuestra su éxito en la época.

Desarrolla la historia de amor entre un patriota (Alfonso de Alcalá) y una modistilla madrileña (Rosario). El joven es un pintor, discípulo de Francisco de Goya, pintor de la corte de Carlos IV en un momento en que la situación política del país atraviesa uno de sus momentos más difíciles: crisis política, cambio de monarca e invasión francesa. Pero Alfonso es seducido por una inteligente y apasionada espía francesa, Laura de Montigny que, a su vez, enamora a un joven afrancesado, el marqués de Montebello, quien tenía asegurado un puesto en la Junta de Regencia. Paralelamente, los capitanes de artillería Luis Daoíz y Pedro Velarde observan como cada día los franceses toman posiciones y se hacen con el control del país. Alfonso descubre la traición de su amante francesa y la abandona. El 2 de mayo de 1808, el pueblo de Madrid se levanta en armas contra los franceses y un gran número de hombres, encabezados por Daoiz y Velarde, defienden el Parque de la Artillería. No obstante, los franceses consiguen asaltarlo y hacerse con el control de la capital. Al día siguiente se preparan las ejecuciones de los prisioneros, entre los que se encuentra Alfonso. José Buchs aprovechó la ocasión para homenajear a Goya, imitando la composición del famoso lienzo Los fusilamientos de la Moncloa. Rosario, que ha perdonado a su novio, Laura de Montigny y el Marqués de Montebello, arrepentido, tratan de conseguir el indulto que posteriormente concede el mariscal Murat. La película finaliza con el regreso de Laura a Francia, el triunfo del amor entre Rosario y Alfonso, y la promesa del marqués de redimirse luchando en Zaragoza.

Fotograma de la película El Dos de Mayo

Como se aprecia en estos fotogramas, en las primeras décadas del siglo XX predominó una visión heroica de la Guerra de Independencia, que exaltaba la valentía de los patriotas. Este término fue utilizado, en las siguientes décadas, para designar a los españoles que lucharon contra los franceses y que fueron ejemplo de heroísmo y valor, tal y como describe el filme. La antítesis del patriota fue el afrancesado.

La Historia llevada al cine

En la película aparecen personajes históricos como los oficiales españoles Daoiz y Velarde, convertidos en héroes populares. Los militares franceses piden despóticamente su rendición incondicional, a lo que el capitán Daoiz responde con la histórica frase: «Si tuvierais valor para hablar con vuestro sable, no me trataríais así». Juan Malasaña y su hija Manuela también son mencionados en la película, tal y como los recuerda la leyenda, muriendo heroicamente en la lucha por la libertad. Estudios actuales han desvelado que Manuela Malasaña, costurera de profesión, fue detenida por llevar unas tijeras, bajo la acusación de portar armas. Investigaciones realizadas ya hace años también demostraron la relación entre el alzamiento del 2 de mayo y el motín de Aranjuez, por lo que resulta muy probable que el levantamiento de Madrid hubiera sido dirigido por una Junta de notables. Sin embargo, durante el reinado de Alfonso XIII, se pensaba que había sido un alzamiento espontáneo, tal y como muestra la película. Como señalaban los títulos del filme mudo «Hacia las 10 de la mañana, varios grupos de paisanos recorrían las calles de Madrid gritando ¡Vecinos, a las armas! ¡Mueran los malos compatriotas!’».

Cartel de la película de El Dos de Mayo

La exaltación de la Patria y los valores heroicos tampoco faltaron, como puede observarse en la frase con que finaliza: «Ha pasado el tiempo. Pero la Patria, madre amorosa, recoge en sus brazos los cuerpos de los mártires que mueren por Ella, mientras la Historia esculpe sus hombres en letras de oro para darles gloria, honor e inmortalidad.»

El filme fue un producto épico en el que Buchs destapó una voluntad populista, demostrando su facilidad para recrear ambientes históricos. La casa Ediciones Forns-Buchs se volcó en esta su tercera producción, lo que hizo posible poner en escena un gran número de figurantes y caballos, un variado vestuario y un buen surtido de efectos especiales. Rodada principalmente en Madrid, su larga lista de localizaciones incluyó las calles de Sacramento y Letamendi, la plazuela del Cordón, los jardines de La Moncloa, la Casa de Iván de Vargas, el Palacio de Liria, el estudio de Goya, la Moncloa y el puente de los franceses. El filme fue pródigo en escenas grandiosas, llenas de una espectacularidad propia de la época, gracias a las cuales la trama amorosa pudo desplazarse discretamente a un segundo plano en la atención de los espectadores. Las escenas de interior se colorearon a mano en naranja, las de noche en azul y los exteriores en amarillo.

A su estreno, que tuvo lugar en los céntricos cines Real Cinema y Príncipe Alfonso de Madrid, acudieron los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia, mientras los diarios conservadores elogiaban la película. De esta manera, esta cinta se convirtió en uno de los éxitos comerciales de 1927 y 1928. Tras mantenerse tres semanas en cartel, se proyectó en prácticamente todas las provincias, creándose nueve copias para su distribución, lo cual representó un gran acontecimiento dentro de una industria que estaba casi consolidándose en aquellos momentos. Dado que se esperaba un gran éxito comercial, se cuidaron especialmente esas copias, encadenados y títulos de entrada, así como la coloración.