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La Adoración de los Reyes Magos, por RubensMuseo del Prado

Seis curiosidades de los Reyes Magos que explican su origen

El relato bíblico contaba cómo unos magos llegados desde Oriente fueron guiados por una estrella hacía Belén para que adorasen a Jesús, el Rey de los judíos que acababa de nacer

La Adoración de los Reyes Magos es una escena religiosa que aparece en los frescos, mosaicos y frisos de templos cristianos precristianos, medievales y renacentistas, que además han plasmado artistas como Giotto, Botticelli, Rubens o Velázquez.

1. Su origen está en la Biblia

La primera vez que escribieron sobre los Reyes Magos fue en la Biblia, exactamente en el Evangelio que redactó san Mateo. Pero muy por encima: no menciona sus nombres, ni que eran tren o qué aspecto tenían. El relato bíblico contaba cómo unos magos llegados desde Oriente fueron guiados por una estrella hacía Belén, para que adorasen a Jesús, el rey de los judíos que acaba de nacer. La noticia corrió como la pólvora por la región y llegó a los oídos de Herodes el Grande, el Rey de Judea, que invitó a los magos a su palacio para que le contaran quién era ese niño del que todo el mundo hablaba y dónde podía ir para adorarlo él también. Los tres magos, guiados por la estrella continuaron su camino y llegaron al pesebre donde encontraron al niño, junto a sus padres José y María. Los Reyes Magos se postraron ante la Él y le obsequiaron con tres regalos que habían portado desde Oriente: oro, incienso y mirra. No se quedaron demasiado tiempo y durante su regreso un ángel se les apareció para advertirles de que no fueran a ver a Herodes, que lo único que quería era encontrar al niño Jesús para acabar con su vida.

Melchior Gaspar y Baltasar representados en el mosaico de la basílica de San Aplonar el Nuevo Siglo VI

2. Magos, reyes o astrólogos

Los Reyes Magos no eran hechiceros, ni hacían trucos o algo parecido. Su apodo de «magos» tiene su origen en la descripción que hacen de ellos en los Evangelios Apócrifos (los textos religiosos descartados por los primeros cristianos que no se incluyeron dentro de la Biblia), donde el término se puede interpretar como sinónimo de astrólogo. Es decir, sabios que a través del estudio y observación de las estrellas pueden predecir acontecimientos. Por ejemplo, en el Auto de los Reyes Magos del siglo XII, el texto teatral más antiguo que se conserva en castellano, se nombra a los tres como steleros (astrólogos) y no les considera reyes. Pero durante la antigüedad el término «mago» también hacía alusión a sabio, es decir, estudioso de la sabiduría. Sea como sea, la esencia es la misma. A partir del siglo VIII se presentaron como reyes en las representaciones de arte religioso.

3. Los magos de las catacumbas de Roma

Se lo debemos en parte a las catacumbas de San Priscila en Roma, donde las pinturas del siglo II representan a los Reyes Magos como nobles de origen persa. También algunas interpretaciones que hicieron los padres de la Iglesia sobre textos del Antiguo Testamento determinaron el origen oriental de Sus Majestades.

Adoración de los Reyes Magos, de Murillo

4. Oro, incienso y mirra

En el siglo III d. C, el teólogo Orígenes planteó que si eran tres las ofrendas que se le habían hecho a Jesús, tres debían ser los Reyes Magos. Melchor portaría el oro para alabar la realeza de Cristo, Gaspar ofrece incienso al niño como símbolo de su divinidad, y Baltasar le regala la mirra como reflejo de la humanidad de Jesús, porque era una sustancia utilizada para embalsar cadáveres.

5. Salieron de un mosaico bizantino

Los nombres de Melchior, Gaspar y Balthassar aparecieron escritos por primera vez encima de tres figuras de un mosaico del siglo VI, situado en la espléndida basílica de San Apolinar el Nuevo, en Ravena (Italia). La escena muestra tres hombres vestidos con trajes rojizos, verdes y blancos al estilo oriental que llevan un gorro frigio. Esa imagen ha ido evolucionando con las corrientes artísticas durante siglos, pero los nombres de Melchor, Gaspar Baltasar han permanecido intactos desde el siglo IX, cuando el historiador Agnello los escribe en Pontificalis Ecclesiae Ravennatis.

6. Los Reyes que representaban continentes y edades

Si en los mosaicos de Rávena eran los tres de una tez blanca, eso cambiaría en las obras de arte posteriores. A Melchor se le asociará con las poblaciones europeas y llevará barba blanca como símbolo de la vejez; Gaspar se representará en cuadros con rasgos asiáticos, aspecto maduro y barba oscura; por último, Baltasar pasará a ser negro como representación de la población de África. Puede que extrañe el simbolismo geográfico, pero por entonces no se había descubierto el continente americano. Un aspecto importante es que los tres Reyes Magos representan las tres edades del hombre, con sus virtudes y defectos.

Desde entonces su misión ha sido la de llevar felicidad y regalos a los niños del mundo que se han portado bien, aunque muy pocas veces tienen que dejar carbón para aquellos que se han portado mal. Pero el trabajo que hoy realizan los Reyes Magos consiste en llenar de alegría los hogares el día de la Epifanía del Señor ante los magos de oriente, día en el que se dio a conocer a los paganos del mundo.