Fundado en 1910

En el dibujo se puede leer: «Plano de la cubierta inferior con 292 esclavos en la bodega»

Cuando en la América del siglo XIX existían «granjas para la cría de esclavos»

Firmaban contrato para trabajar una media de diez años en estas naciones sin ser conscientes de que estaban sentenciando voluntariamente su esclavitud por tiempo limitado

Inglaterra prohibió la trata de esclavos en 1807 (captura de hombres y mujeres en África y su traslado a América para su venta) para, 26 años después, abolir la esclavitud por una mezcla de sentimientos humanitarios, liderados por la Sociedad Antiesclavista de Londres (fundada en 1823), y por el convencimiento de que en plena Primera Revolución Industrial eran más baratos y productivos los obreros que los esclavos. A partir de este momento la Armada inglesa se dedicó en las costas de África a perseguir y capturar a los barcos negreros que transportaban esclavos a América. Esta labor policial se convirtió en un próspero negocio, por la captura de barcos esclavistas, para la Corona inglesa.

La abolición de la esclavitud

En 1822 la Sociedad Americana de Colonización fijó el territorio de Liberia como el lugar para enviar esclavos afroamericanos liberados procedentes de Estados Unidos. Veinticinco años más tarde se fundó la República de Liberia. En Francia, la Convención Nacional decretó el fin de la esclavitud en 1794. Sin embargo Napoleón Bonaparte la restauraría en 1802. En 1848 la II República Francesa abolió la esclavitud en sus colonias. Estados Unidos prohibió la trata en 1808 aunque el fin de la esclavitud no llegó hasta la victoria en 1865 de la Unión sobre los territorios confederados en la Guerra de Secesión (1861-1865). Tras numerosas luchas y debates, en España la esclavitud se abolió completamente en 1886. En 1888 se promulgó el fin de la esclavitud en Brasil, siendo el último país de Hispanoamérica en abolirla.

El fin de la esclavitud no llegó hasta la victoria en 1865 de la Unión en la Guerra de Secesión

La abolición de la trata cambio el mercado de esclavos en América: Ingleses, franceses, españoles, peruanos, norteamericanos... comenzaron a buscar en Asia, en China, que firmaban contrato para trabajar una media de diez años en estas naciones sin ser conscientes de que estaban sentenciando voluntariamente su esclavitud por tiempo limitado.

La llegada de chinos a las islas del Pacífico y a América no palió la demanda de mano de obra esclava fundamentalmente para labores agrícolas o para recoger el guano. Los propietarios de esclavos en naciones como Estados Unidos o Cuba –dado el enorme precio que ya alcanzaban los pocos esclavos que llegaban de África a los palenques para su venta– comenzaron a montar granjas para la cría de esclavos. Varones fuertes y robustos eran seleccionados como sementales, al tiempo que se reunía una de mujeres jóvenes y sanas cuya única misión era dar a luz el mayor número posible de seres humanos que, tras ser criados durante los primeros años de su vida, eran luego sacados a la venta.

El aberrante negocio de vender bebés

En la actualidad en Malasia traficantes de bebes tiene a numerosas mujeres en situación práctica de esclavitud para luego vender sus bebes (ahora a través de la red y no en «el palenque de esclavos») a los mejores postores. Los traficantes las llevan a Malasia con la promesa de un empleo, pero en su lugar son violadas y retenidas junto con otras mujeres embarazadas en casas aisladas, las llamadas «granjas de bebés». Cuando un comprador no quiere pasar por el largo proceso de adopción legal, puede contactar con uno de estos «agentes» por redes sociales y visitar las «granjas» para elegir el bebé deseado en función del aspecto físico de la madre.

Tras ser criados durante los primeros años de su vida, eran luego sacados a la venta

Los precios varían en función del tono de piel, la raza de la madre y el sexo del bebé. Los compradores pagan un mínimo 7.000 euros por bebé, a lo que hay que sumar los gastos médicos del parto (unos 500 euros) y la falsificación del certificado de nacimiento (unos 1.400 euros). «Los niños cuestan más dinero que las niñas», «actualmente, la mayor demanda es de bebés racialmente mixtos porque se consideran más guapos y porque al haber muchos matrimonios mixtos en Malasia, los pueden hacer pasar como sus hijos biológicos», son algunas de las declaraciones que hizo Aegile Fernandez, codirectora de la ONG por los derechos de las mujeres Tenaganita para explicar con crudeza la realidad de este negocio.

Han pasado más de dos siglos del comienzo de la abolición de la trata y casi igual tiempo de la abolición de la esclavitud pero en algunos países del mundo las cosas casi no han cambiado.