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José Antonio Primo de Rivera

El quinto entierro de José Antonio, obsesión perenne de la izquierda

Sus restos serán exhumados el próximo lunes del Valle de los Caídos, coincidiendo con la fecha del cumpleaños del fundador de la Falange

El próximo 24 de abril los restos mortales de José Antonio Primo de Rivera serán exhumados, un día en el que se conmemora el nacimiento del fundador de la Falange. El Gobierno cumple así con la solicitud de la familia de trasladar sus restos mortales a un cementerio religioso tras la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática el pasado mes de octubre. Cuando esto ocurra será su quinto entierro: primero en la fosa común, después en el nicho Alicante, más tarde en El Escorial, luego en el Valle de los Caídos y ahora en el madrileño cementerio de San Isidro.

José Antonio Primo de Rivera durante un mitin de Falange

Nacido en Madrid el 24 de abril de 1903, se convirtió en una de las figuras más contradictorias y controvertidas de la España del siglo XX. Aristócrata por nacimiento, abogado por vocación, político –según él– por necesidad, su actuación en la política española abarcó un breve período, entre 1933 y 1936, «durante el que experimentó una rápida evolución desde el conservadurismo autoritario hacia el nacionalsindicalismo, una variante de fascismo radical que tuvo en el partido que dirigió, Falange Española de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista (JONS), su expresión fundamental antes de la Guerra Civil», recoge la Real Academia de la Historia (RAH) en su biografía.

Fue el mayor de seis hermanos y movido por el deseo de «emular y superar» a su padre, el dictador Miguel Primo de Rivera, José Antonio rompió la tradición militar familiar y se inclinó por los estudios de Derecho. El historiador Joan Maria Thomàs, académico de la RAH le describe como un hombre complejo que «combina la seriedad, rigor, timidez, simpatía y violentos brotes de cólera bíblica, todo ello envuelto en una cuidada apariencia física».

El 29 de octubre de 1933, en el mitin del Teatro de la Comedia, fundaba Falange Española, un movimiento que se decía ni de derechas ni de izquierdas, pero sí antimarxistas y anticapitalista que se convirtió en la bestia negra de los elementos callejeros frentepopulistas.

En agosto de 1934 José Antonio Primo de Rivera y Antonio Goicoechea firmaron un pacto por el cual se afirmaba la coincidencia entre los partidos Falange Española y Renovación Española en lo referente a los aspectos sociales y políticos. Esta vinculación quedó reflejada en nueve puntos programáticos. El pacto no dejaba de ser un nuevo intento de José Antonio por no ver desaparecer su partido político. Con Renovación Española, Falange Española tenía tan solo cuatro puntos en común: antimarxismo, antirrepublicano, patriotismo y religión. En todo lo demás, ambas formaciones políticas, eran completamente diferentes y opuestas.

Ruiz de Alda (centro) junto a Valdecasas y Primo de Rivera, en el mitin fundacional de Falange

En marzo de 1936 José Antonio era detenido por tenencia «ilícita» de armas como consecuencia de la colocación de una bomba en el domicilio de Largo Caballero y meses después trasladado a un penal en Alicante y fusilado el 20 de noviembre. No se casó, tampoco tuvo hijos y su legado principal fue la creación de una Falange que, descabezada, se convertiría en instrumentalizada por el franquismo para la creación de FET de las JONS.