Fundado en 1910

La fundación de Santiago, óleo de Pedro Lira (1888)Museo Historico Nacional, Santiago

Tras la pista de Pedro de Valdivia: del servicio a Carlos I en Flandes e Italia a la conquista de Chile

Extremadura llegó al Nuevo Mundo a través de los conquistadores y perduró en su toponimia con Santiago de Nueva Extremadura, la ciudad que fundo Valdivia y que es la actual capital de Chile

Valdivia es una ciudad y comuna de la zona sur de Chile, y la capital de la provincia homónima. Más allá del dato, el nombre no es casual y como pasa en tantos otros lugares de Hispanoamérica y del mundo, explica un pasado histórico que determina el carácter del lugar o del país. En este caso, el topónimo hace alusión al apellido de Pedro Valdivia, un extremeño que luchó en el ejército de Carlos I de España y V de Alemania en varias plazas del Imperio, cruzó el Atlántico para participar en expediciones en la actual Venezuela, en Perú con Pizarro y después participó en la conquista del sur de Chile. Aunque su aventura de exploración empezó varios años atrás a miles de kilómetros.

Pedro de Valdivia

Pedro de Valdivia nació en torno al 1500, posiblemente el 17 de abril de 1497, en la villa de Castuera, próximo a La Serena en Badajoz. De lo poco que se conoce de su infancia es lo que recoge el Diccionario Biográfico de la Real Academia de la Historia, donde se explica que seguramente sus padres fueron Diego de Valdivia e Isabel Gutiérrez. Nació en una familia de hidalgos –nobleza de rango inferior– y contó con una educación básica que le permitió aprender a leer y escribir.

Su destino estaba ligado a la vida militar. En 1521 dejó su hogar para unirse a las huestes de su nuevo rey, Carlos I, que había llegado a la península en 1517. Pedro combatió en Flandes y después en varias contiendas de la actual Italia. Participó en el asedio y toma de Milán, en la crucial batalla de Pavía en 1525, y la defensa de Nápoles como parte del Tercio de infantería. Ese sería su último destino antes de regresar a su villa natal, donde se casó con Marina Ortiz de Gaete. Su legado podría haber terminado ahí, pero tras pasar algunos años en Castuera, emprendió un viaje que le convirtió en personaje histórico que preservó su apellido como conquistador del Nuevo Mundo.

De Extremadura a Chile pasando por Santo Domingo

Sin grandes oportunidades en su tierra, en 1535 emprendió la gran aventura de su vida. Como hidalgo y hombre de armas se enroló en una nueva empresa al servicio de su rey, que desde hace un lustro era el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Cruzó el Atlántico y llegó a las costas de la actual Venezuela donde se puso bajo las órdenes de Jerónimo de Alderete, que tenía como misión reforzar con sus hombres la expedición que Jerónimo de Ortal estaba realizando en el Orinoco.

Mapa de Santiago en 1552

Como tónica habitual de la época, algunos hombres de Alderete, entre los que probablemente estaba Pedro Valdivia, participaron en un motín que depuso a Ortal del mando. A pesar de ello, la expedición continuó varios meses más, hasta que Nicolás de Federmann, un explorador alemán que participó en la conquista española, ordenó apresar a los culpables y enviarlos para ser juzgados a Santo Domingo.

Aunque no se sabe si Pedro de Valdivia estuvo implicado en la sublevación, está demostrado que estuvo durante algún tiempo en Santo Domingo, y desde allí participó en una nueva empresa. Por entonces, Francisco Pizarro afrontaba una lucha contra los incas, que se habían opuesto a la presencia española en ciertas regiones. Ante esta situación, Pizarro solicitó refuerzos a la Audiencia de Santo Domingo, y así es como Valdivia se unió a esa fuerza militar de refuerzo que atravesó el istmo de Panamá y llegó hasta Lima en pocas semanas.

Pedro de Valdivia vio la oportunidad perfecta para solicitar a Pizarro un permiso para conquistar la zona sur de la actual Chile

Desde 1536 Valdivia estuvo bajo las órdenes de Pizarro. Fue nombrado maestre de campo un año después, y vivió de cerca la disputa entre Pizarro y Diego de Almagro por Cuzco, participó en la conquista de varias regiones, obtuvo encomiendas y beneficios por su implicación en varias minas de plata. Llegado a este punto, Pedro de Valdivia vio la oportunidad perfecta para solicitar a Pizarro un permiso para conquistar la zona sur de la actual Chile.

Es en 1540 donde emprende su empresa, con grandes dificultades económicas y muy pocos integrantes: una decena de españoles, entre ellos Inés Suárez (que era amante de extremeño) y un contingente de indios yanaconas. A estos se sumarían después integrantes de otras expediciones hasta conformar una fuerza considerable que permitió agilizar la conquista de los territorios. La historia de la conquista de Chile es extensa y ya se abordó en otro artículo, pero se resume en que Valdivia fue el conquistador extremeño que fundó Santiago de Chile, se convirtió en el primer gobernador de Chile, se enfrentó a los indios en la guerra de Arauco y murió a manos de los indios mapuches aunque consiguió la gloria que deseaba.