«No tenemos intención de bajar nuestra bandera y no creemos que vayáis a abrir fuego sobre nosotros», dijo el nuevo sultán de la isla africana de Zanzíbar en respuesta al ultimátum de Reino Unido. En menos de una hora, tras un intenso bombardeo, el nuevo sultán no tuvo más remedio que levantar la bandera blanca y concluir la que sería la batalla más rápida de la historia