Arqueólogos españoles hallan a las afueras de Roma la sala de banquetes de la villa del emperador Adriano
«El diseño descubierto es especialmente singular y único en su época, que más tarde se reproduciría en otras construidas en distintos lugares del Impero Romano», indican los arqueólogos en la nota
En su última y más reciente excavación, el equipo científico del Seminario de Arqueología de la Universidad Pablo Olavide ha realizado un importante hallazgo en una de las construcciones más emblemáticas del emperador hispano Adriano: la villa Adriana ubicada a 28 km de Roma.
Los arqueólogos han sacado a la luz restos de un triclinio acuático o sala de banquetes rodeada de agua en la que se aplicó una solución arquitectónica muy singular para su época, según advierte la universidad en una nota oficial. Está compuesta por una plataforma central que, en tres de sus lados, está bordeada por un estanque.
Las excavaciones, centradas en el pórtico central del Palazzo de Villa Adriana, área que fue la primera zona residencial del emperador, han revelado que tanto el interior del estanque como el zócalo de las paredes estaban revestidos con mármol blanco, destacando el mármol de Carrara y otros procedentes de diferentes partes del Imperio. Aunque este tipo de sala era habitual en la arquitectura romana, «el diseño descubierto es especialmente singular y único en su época, que más tarde se reproduciría en otras construidas en distintos lugares del Impero Romano», indican los arqueólogos en la nota.
Así, podremos ver ejemplos similares de estos comedores rodeados de agua en diferentes partes de la península ibérica como en la villa romana de Salar (Granada) y en la casa dos Repuxos en Conimbriga (Coimbra, Portugal). Sin embargo, la construcción de este tipo más famosa probablemente sea la villa de Tiberio en Sperlonga, con un triclinio en medio de una piscina a la que solo se podía acceder en barco.
Por su parte, las dimensiones reducidas de las plataformas donde se celebraba la comida en la villa Adriana sugieren que estos espacios estaban reservados para el emperador y dos comensales más. «La localización de dos triclinios acuáticos nos permite entender mejor las innovaciones arquitectónicas llevadas a cabo en villa Adriana y el papel simbólico del agua en las estancias dedicadas al banquete», ha detallado Rafael Hidalgo, profesor de la universidad sevillana y director de un proyecto desarrollado de forma ininterrumpida desde 2003 y el único español en este yacimiento, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El proyecto de la Universidad Pablo Olavide en villa Adriana junto al proyecto institucional del CSIC en la ciudad romana de Tusculum, son los dos únicos proyectos de excavaciones arqueológicas españoles que actualmente se desarrollan en Italia.