Sarkozy culpable de financiación ilegal

El tribunal de Paris ha declarado culpable a su expresidente Nicolás Sarkozy. Junto con él, 13 miembros de la campaña recibieron la misma condena que incluyen una pena de un año de cárcel y 3.750 euros de multa por financiación ilegal de la campaña de 2012.

Conocido públicamente como el «affaire Bygmalion», la artimaña consistió en recurrir a una agencia de ese nombre para ocultar sus excesivos gastos de campaña, a través de un sistema de facturas falsas. A ojos del público, la campaña electoral de 2012 de Sarkozy costó 22 millones de euros. En realidad, su coste fue más bien el doble, 42 millones de euros que Sarkozy negó haber gastado, manteniendo su inocencia.

Ya en marzo se convirtió en el primer expresidente francés condenado a prisión; este juicio se suma a una serie de comparecencias de Sarkozy frente a los tribunales parisinos tan del último año. En noviembre del 2020 se le acusó de corrupción y tráfico de influencias al intentar sobornar a un juez, mientras que en marzo fue a condenado a tres años de prisión por corrupción.

Durante la campaña de 2012 se vio a Sarkozy actuar como un candidato «a la americana», dándolo todo en esas elecciones de manera desenvuelta y «exigiendo meetings diarios». Tras la campaña masiva se escondió un despilfarre de dinero que no llegó a descubrirse hasta dos años más tarde. 

Esta segunda condena será un duro golpe para la reputación política de un país muy orgulloso de su historia republicana.