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Matteo Salvini en las elecciones municipalesRicardo Antimiani / EFE

Elecciones Italia

¿Estamos ante el renacimiento de la izquierda en Italia?

La derecha trastabilla en las elecciones municipales, pero tampoco puede dar todo por perdido

Este ha sido un buen otoño para la izquierda en Europa. En Alemania y Noruega han ganado las elecciones generales partidos de centroizquierda, tendencia que percibe el sur tras unas elecciones municipales muy zurdas en Italia.

Por ahora solo Roma como se perfila como potencia derechista a manos del abogado Enrico Marchetti, plaza que sin embargo debe someterse a una segunda vuelta para definirse. Mientras Milán, Nápoles y Bolonia se rindieron en primera ronda ante la izquierda italiana, sembrando la incertidumbre de cara a las próximas elecciones generales, en 2023.

El antiguo primer ministro Enrico Letta se entusiasma ante lo que ve como señal de que «la derecha es derrotable», testimonio de la histórica inclinación política italiana, que pocas veces ha favorecido a su izquierda. Y gran parte de este cambio se debe a un descenso en popularidad de los dos partidos que se clasifican como «extrema derecha» tanto internacional como domésticamente: los «Hermanos de Italia», liderados por Giorgia Meloni, y el partido de Matteo Salvini, la «Liga del Norte».

Ha sido decepcionante pero no del todo sorprendente el poco apoyo a la derecha en las municipales. Ya se vio venir con el destierro de Virginia Raggi, exalcaldesa en Roma y perteneciente al partido nacionalista Movimiento Cinco Estrellas.  Muchos expertos y sondeos ya sugerían que dividir la derecha entre Salvini y Meloni sería nocivo para sus resultados.

Pero es justamente por eso por lo que no deberíamos sacar conclusiones respecto a un posible renacimiento de la izquierda en Italia.

Por qué si el bloque conservador es listo, se tomará estas elecciones como un simulacro de lo que está por venir, una versión menos importante de lo que pasará en las generales si la derecha sigue dividida. Asimismo, cabe mencionar que esta última votación ha batido récords en el número de votantes, con solo un 41.65% de los votantes ejerciendo su derecho a sufragio.

También podría sugerirse un patrón demográfico ya presente en el resto de Europa: las ciudades mas metropolitanas, con mayor cantidad de jóvenes, tienden a votar de izquierdas, mientras que en las áreas rurales y ciudades menores se vota más de derechas.

Por lo tanto, la victoria de la izquierda en unas elecciones municipales y con poca asistencia, en un momento en que la derecha trastabilla, no tendría por qué definir desde ahora las próximas elecciones generales de Italia