Afganistán
100 ejecuciones extraoficiales y otros tantos secuestros: los abusos del Talibán que denuncia Occidente
Una declaración firmada por 23 países occidentales señala su «gran preocupación» ante la violencia del Talibán
Son 23 los países occidentales que, capitaneados por Estados Unidos, han firmado una declaración conjunta denunciando abusos a los derechos humanos por parte del Gobierno talibán en Afganistán. Su preocupación surge de un incremento en los asesinatos premeditados contra miembros y personal del antiguo gobierno afgano.
En su declaración conjunta, Estados Unidos, la Unión Europea, Reino Unido, y otros 19 países exigen al régimen islámico que respete su promesa de no herir a antiguos empleados del gobierno o de su seguridad.
«Nos preocupa profundamente la cantidad y frecuencia de asesinatos selectivos y desapariciones apoyadas por el gobierno», reza el documento.
La iniciativa nace tras la publicación de un informe de la organización Human Rights Watch, que documenta más de 100 ejecuciones y secuestros a oficiales del antiguo gobierno de Afganistán desde que el Talibán tomó control del país hace casi cuatro meses.
Seguiremos midiendo al Talibán por sus actos
También detalla el asesinato de 47 miembros de las fuerzas de seguridad afganas, que se rindieron ante o fueron capturados por el Talibán entre las fechas del 15 de agosto y el 31 de octubre. Esto sucede a pesar de las promesas del nuevo régimen de no herir a antiguos empleados gubernamentales.
La corta declaración firmada por los países occidentales delinea sus profundas preocupaciones respecto a las conclusiones del documento de Human Rights Watch, y solicita la investigación de todos los casos de ejecuciones extrajudiciales y desapariciones.
«Seguiremos midiendo al Talibán por sus actos», sentencia la comunidad internacional, que sigue negándose a reconocer la legitimidad y autoridad del nuevo régimen afgano.
Son ya muchas las instancias en las que los actos del Talibán contradicen sus compromisos, y este no es el primer informe humanitario que denuncia asesinatos selectivos.
En agosto, Amnesty Internacional publicó un reportaje compartiendo una brutal masacre: 300 soldados talibanes viajaron a la zona de Dahani Qul, donde muchos militares del antiguo gobierno residían junto a sus familias. Ese 30 de agosto, los soldados ejecutaron a nueve de los exoficiales (que ya se habían rendido), dos personas más murieron en el tiroteo, y otros dos civiles fallecieron en la pelea, incluyendo a una adolescente de 17 años.