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Manifestación en las calles de Trípoli, imagen de archivoAFP

Milicianos armados tratan de evitar las elecciones en Libia y rodean la sede del primer ministro

El país espera celebrar elecciones legislativas y presidenciales el próximo 24 de diciembre, pero existen serias dudas de que la cita electoral pueda celebrarse

Milicianos libios de la Brigada Al Samoud rodearon durante la noche del miércoles al jueves la sede del primer ministro libio, Abdul Hamid Dbeibé, para evitar la celebración de las próximas elecciones presidenciales en Libia, previstas para el 24 de diciembre.

«No habrá elecciones presidenciales en Libia. Cerraremos todas las instituciones estatales en Trípoli», afirmó el líder de la Brigada, Salah al Badi en declaraciones recogidas por Europa Press.

La acción de los milicianos armados se produce después de la destitución de varios militares y el nombramiento de sus sustitutos. Salah al Badi anunció, además, que su acción en la sede del primer ministro persigue bloquear la acción del gobierno libio para que la celebración de la cita electoral resulte imposible.

Ante la posibilidad de que la residencia del presidente del país, Mohamed Menfi, también sufriera el acoso de los milicianos, el ejército libio se trasladó hasta la sede del Consejo Presidencial para llevar al mandatario a un lugar seguro.

Las destituciones de militares que movieron a los milicianos a rodear la sede del primer ministro se adoptaron a lo largo del miércoles. En concreto, el Consejo Presidencial destituyó a Abdul Basit Marwan, comandante de la zona militar de Trípoli, y nombró a Abdel Qader Mansur como su sustituto.

Qader Mansur asumirá también, por mandato del Consejo Presidencial, el cargo de general al mando del ejército.

La tensión en Libia es máxima. La convocatoria electoral ha agravado aún más el conflicto entre facciones en Libia. El martes 14, milicias del mariscal Jalifa Hafter se enfrentaron con fuerzas del Consejo Presidencia en la ciudad de Sabha .

Incluso el Alto Consejo de Estado de Libia, por medio de su vicepresidente segundo, Omar Bushá, solicitó aplazar las elecciones presidenciales para que no coincidan con las parlamentarias.

Dbeibé busca en lograr una victoria contundente en las elecciones que le permita cerrar la crisis política que sufre el país tras la caída en 2011 del régimen de Muamar el Gadafi. Para ello, pretende celebrar juntas las elecciones legislativas y presidenciales, ya que considera que la coincidencia de las dos citas electorales le favorecería.

El mariscal Hafter, que se presenta a presidente, rechaza la doble convocatoria, lo que amenaza con romper el acuerdo de unificación de las administraciones libias alcanzado hace un año.

También en la comunidad internacional existen serias dudas sobre la conveniencia de la doble celebración electoral. Según un antiguo subsecretario general de la ONU, Jamal Benomar, «dadas las profundas brechas sociales y políticas, las elecciones podrían traer más daño que beneficio a Libia», afirmó en declaraciones a AFP.

«No se dan las condiciones necesarias para tener elecciones libres y justas. Los libios están demasiado divididos como para aceptar los resultados», aseguró.