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El primer ministro británico, Boris Johnson, en el número 10 de Downing StreetMatt Dunham / AFP

Un nuevo escándalo para Boris Johnson: Downing Street organizó otra fiesta clandestina para 100 personas

Aún queda por demostrar si el propio primer ministro asistió, aunque varias fuentes confirman que sí

El primer ministro Boris Johnson inaugura el año con un nuevo escándalo: se han filtrado revelaciones de otra fiesta en el número 10 de Downing Street, organizada durante el primer confinamiento, y a la que fueron invitadas 100 personas.

Un email, publicado por la cadena ITV News, invitaba al secretario privado de Johnson, Martin Reynolds, a «copas con distanciamiento social en el jardín del número 10», supuestamente para «celebrar el buen tiempo» del 20 de mayo de 2020. En aquel momento, las primeras restricciones por coronavirus seguían vigentes: quedaban prohibidas las reuniones de más de dos personas.

Se estima que de las 100 personas invitadas, 30 asistieron. Dos testigos aseguran que el primer ministro y su mujer, Carrie Johnson, se encontraban presentes, algo que el propio Boris aún no ha confirmado.

Varias fuentes comentan que miembros del personal de Downing Street mostraron preocupación sobre el evento; «Había conversaciones sobre lo insensato del mail», comparte una persona involucrada.

«Recuerdo que la gente decía, ‘¿Qué demonios’», añade otra. Además, testigos cuentan que se instaló una larga mesa en el jardín de la residencia del premier, incumpliendo las normas de distanciamiento social.

La policia metropolitana ya está en contacto con el gobierno al respecto de este «amplio informe de supuesto incumplimiento de las normas del coronavirus». Aún así, el ministro de salud Edward Argar urge a los medios no precipitarse.

«Entiendo la rabia, tristeza, y decepción que muchas sentirán con estos alegatos», comunicó al medio británico BBC. Añadió sin embargo que es «importante» permitir que se desarrolle una investigación sobre las reuniones en Downing Street antes de sacar conclusiones.

[Boris Johnson] no puede huir y esconderse esta vezEd Miliband, exlider laborista

Es algo con lo que no está de acuerdo Ruth Davidson, líder del Partido Conservador en Escocia. «Nadie necesita que un oficial les cuente que estaba en una fiesta de borrachos en su propio jardín», tuiteó. Comentó que el público estaba «debidamente enfurecido» después de todos sus sacrificios. «¿Que estaba pensando esta gente?», lamentó.

En plena crisis política, la reputación de Johnson decae a grandes velocidades, sumida en escándalo tras escándalo desde finales del 2021. Esta es la cuarta en una serie de fiestas ilegales en Downing Street durante épocas de restricciones. Además, Johnson se enfrenta a acusaciones de corrupción por la turbia remodelación de su residencia.

La oposición no ha tardado en denunciar la gravedad de este último escándalo; el Partido Laborista advierte de que el primer ministro tendrá que enfrentarse a «preguntas serias» si se demuestra que asistió al evento.

Asimismo, el laborista Ed Miliband avisó de que Johnson «no puede huir y esconderse esta vez» de estos alegatos, como otras veces ha hecho.

Los Demócratas Liberales insisten en una investigación policial. Un portavoz de la Metropolitana explica que las fuerzas «son conscientes de estos amplios informes con relación a un supuesto incumplimiento de las regulaciones de protección sanitaria en Downing Street el 20 de mayor de 2020, y están en contacto con el gabinete oficial».